INCLIVA participa en un ensayo clínico pionero para validar la eficacia de la inmunoterapia en 29 tipos de tumores

El Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA, del Hospital Clínico de Valencia, participa en el ensayo clínico ACROPOLI. Un estudio pionero y de alcance nacional que acaba de ponerse en marcha con el objetivo de evaluar la eficacia de la inmunoterapia en 29 tipos de cáncer distintos al mismo tiempo. Se trata del primer estudio Basket que mide la utilidad clínica de un solo fármaco en diferentes tumores. Con un biomarcador compartido. Y promovido por el grupo cooperativo de investigación académica SOLTI. En concreto, el estudio evaluará el valor predictivo del biomarcador molecular PD1.

La inmunoterapia hoy en día empieza a ser un tratamiento estándar para algunos tipos de cáncer. Sin embargo, todavía no todos se pueden beneficiar de estos tratamientos por igual«, explica Juan Miguel Cejalvo, investigador principal de INCLIVA en el ensayo. Quien añade que “este ensayo clínico va a permitir el estudio de un biomarcador predictor de respuesta a través de diferentes tipos de tumores. Por lo que, además, va a suponer una oportunidad para que pacientes diagnosticados con tumores menos frecuentes puedan participar en este tipo de estudios denominados tipo Basket”.

El Dr. Aleix Prat, Presidente de SOLTI, investigador principal de ACROPOLI, Jefe de Servicio de Oncología Médica del Hospital Clínic de Barcelona y jefe del grupo Genómica traslacional y terapias dirigidas en tumores sólidos del IDIBAPS, añade que en este estudio se comprobará “si, utilizando un biomarcador específico, un subgrupo de estos pacientes pueden beneficiarse de la inmunoterapia como lo hacen otros tipos de cáncer mucho más habituales”.

Objetivos del estudio

Por su parte, el Dr. Josep Tabernero, Director del VHIO, co-investigador principal de ACROPOLI y Jefe de Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitari Vall d’Hebron, destaca que “uno de los objetivos que perseguimos con este estudio es demostrar que el marcador basado en el gen PD-1 -utilizando la detección previa del ARN mensajero- es más sensible para determinar la población de pacientes que se benefician del tratamiento que la expresión de la proteína PD-L1 detectada por inmunohistoquímica. Que es la que utilizábamos hasta ahora”.

Así, la trascendencia del estudio orbita en torno a tres grandes ejes:

  • identificar a los pacientes a los que un campo emergente como la inmunoterapia puede tener un gran impacto
  • hacerlo mediante la oncología de precisión, es decir, a través de biomarcadores que determinen a priori qué pacientes pueden beneficiarse de ello
  • la transversalidad, avanzar hacia un tipo de estudio donde la localización del tumor no sea el objetivo principal.