- Ribó desconoce las actuaciones y negociaciones de su propio asesor de urbanismo y de sus concejalías.
- El alcalde asegura que es «perjudicial para los vecinos» pero sigue colaborando desde el Consistorio para que el proyecto vea la luz con ventas de pastillas de terrenos.
- 14 meses sin responder a las alegaciones de los vecinos.
- 5 meses sin catalogar los BIC encontrados.
- Se ha permitido el expolio de terreno municipal con total impunidad.
El alcalde de Valencia, Joan Ribó se reunió ayer, después de 14 meses con los vecinos de San Antonio de la Zaidía. Una representación de la asociación de vecinos ha relatado a Ribó el proyecto de construcción de megahotel del que su Ayuntamiento ha de dar la licencia de apertura y de obras.
Un proyecto que llevará a más de 1.100 jóvenes a un patio de manzana en hasta 6 edificios que algunos de ellos quedarán a justo 2 metros de las actuales viviendas. Un proyecto cuya ubicación rechazan los vecinos.
Ribó asegura desconocer todo lo relativo a este proyecto
El alcalde Joan Ribó junto con su asesor y coordinador de Urbanismo David Estal se han reunido esta mañana con los vecinos. Han tenido menos de 30 minutos para indicarle el poqué de su total rechazo al proyecto al que han calificado de “pelotazo urbanístico”.
“Conocía el proyecto por lo publicado en medios de comunicación”
Ha afirmado el alcalde ante su asesor y coordinador de urbanismo, que por cierto ha estado en múltiples ocasiones departiendo con los vecinos. ¿Cómo es posible que desconociera lo que hacen sus concejales y asesores más próximos?.
Ribó lo ha comparado con la Clínica del Consuelo en Patraix y ha asegurado que «es una pésima solución que crea conflictos vecinales permanentes».
Más contradicciones entre los hechos y las palabras de Ribó
Ribó ha compararado este proyecto con la clínica del Consuelo de Valencia y ha asegurado que el proycto no puede salir adelante en presencia de los vecinos.
Por contra, ayer mismo su propio partido llevaba a la Junta de Gobierno la ratificación desde Patrimonio Histórico de la venta de una parcela de unos 50 metros cuadrados junto a la acequia de Rascanya a los propietarios colindantes. Unos terrenos calificados inicialmente como viales, en lo que parece una maniobra para adelantar en el proyecto de macrohotel y en el pelotazo que minutos después de la aprobación, el propio Ribó negaba.
“Desconocía la relación de la venta de la parcela con el proyecto de macrohotel y me acabo de enterar por los vecinos”.
De nuevo Ribó muestra sobre la total ignorancia de los proyectos que aprueba y ello puede ser síntoma de tan sólo dos situaciones y ambas muy preocupantes. O no se entera de nada lo que pasa en su Ayuntamiento y su propio equipo le oculta las cosas o miente a los vecinos a la cara. Ambas son preocupantes para los ciudadanos del Cap i Casal.
Una duda surge de inmediato, y es ¿quién mada en el Ayuntamiento de Valencia?. Porque Ribó ante el relato de los vecinos se mostraba muy sorprendido y preocupado.
La inmatriculación de una acequia municipal y su venta a terceros permitida desde el Ayuntamiento
El propio Ribó preguntado por este redactor sobre la inmatriculación por un particular colindante en 2019 de un tramo de acequia propiedad municipal, y su posterior venta a terceros. Siendo un terreno necesario para la construcción de uno de los edificios del macrohotel proyectado, la cara de Ribó se ha desencajado.
“Me acabo de enterar de este asunto por los vecinos y voy a preguntar a ver qué ha pasado”.
Un alcalde al que parece que todos le ocultan lo que pasa en los barrios, los concejales socialistas del equipo de gobierno e incluso sus propios asesores. Un hecho muy grave que nos viene a replantear la gestión absoluta del propio consistorio municipal.
Mientras Ribó aseguraba que era Urbanismo el que tras 14 meses no había respondido a las alegaciones presentadas y lanzaba todos los focos contra Sandra Gómez, casi a la misma hora, Sergi Campillo aseguraba que iban a ser muy escrupulosos con la legalidad. La misma que parece se ha vulnerado en numerosas ocasiones. Campillo seguraba que preguntáramos al alcalde.
La controvertida acequia que divide el terreno y que estaría en mitad de los edificios proyectados
Por la zona pasa la acequia de Rascanya, y existe un informe de agosto del 2021 del Ciclo Integral del Agua (Elisa Valía) que reconoce la situación irregular de la inmatriculación de la acequia a nombre de la mercantil GESPRONE S.L. A pesar de que más de 13 meses después el alcalde asegura desconocer esta situación, conocida además por su asesor de urbanismo ya que los vecinos le habían informado en repetidas ocasiones.
Por el interior de la manzana de la C/Guala, San Bruno y Padre Urbano discurre un ramal de la acequia de Rascanya. En el año 2000, ese tramos fue desviado por los colectores correspondientes quedando sin uso de conducción de agua. Por lo que ese mismo año se cede el ramal al Ayuntamiento de Valencia.
En el 2016, el Tribunal de las Aguas de Valencia, en este caso la Acequia de Rascanya cede la propiedad de las acequias que discurran por suelo urbano al Ayuntamiento de Valencia. Dejando una cláusula de que en un futuro, el 50% del futuro aprovechamiento urbanístico se registra para la propia acequia y el otro 50% quedará para el Consistorio Municipal.
En 2019, existe primero una posesión de una propietaria colindante y posterior inmatriculaciión a nombre de una mercantil, GESPRONE el 5 de junio. Ante la misma se informa a la Acequia, al Ayuntamiento y a los colindantes.
El Ayuntamiento conoce esta inmatriculación desde el 9 de junio de 2019 y la ha permitido.
Ahora existe una venta a terceros de esa propiedad ( la acequia) que se apropió un particular y posteriormente una mercantil con la connivencia del Ayuntamiento de Valencia.
El propio Ayuntamiento involucra a Patrimonio y al Ciclo Integral del Agua, que habrían permitido con su total inacción el expolio del patrimonio de todos
El propio informe del Ciclo Integral del Agua advierte que es propiedad del Ayuntamiento de Valencia y que estaría en posesión de la Concejalía de Patrimonio. Así hasta dos concejalías, una del PSPV y otra de Compromís entrarían en la operación de permitir el expolio de patrimonio municipal.
La venta del terreno colindante
Ayer además en el punto 81 del órden del día se accedió finalmente a vender un terreno a unos colindantes, es en la misma Calle Guala, un terreno destinado en principio a vial de cerca de 50 metros cuadrados. Se vendió a un propietario colindante, un terreno necesario para elevar uno de los edificios del proyecto de macrohotel.
Mientras el alcalde aseguraba a los vecinos que harían lo que fuese para parar el proyecto, vendía una pequeña pastilla de terreno necesaria para completar la operación ya calificada como nuevo pelotazo urbanístico de Ribó y Sandra Gómez.
¿Va a hacer todo lo posible por parar el proyecto o está colaborando con el mismo?. Porque las afirmaciones del alcalde son directamente contrarias a sus acciones actuales.
Los vecinos decepcionados y excépticos
Los vecinos han salido de la reunión sin querer ni valorarla. Son muy excépticos, porque ya otros concejales como Elisa Valía se han reunido con ellos y les han mentido a la cara. También era conocedor de todo el asesor de urbanismo, así que o no informa al alcalde y le oculta la realidad, pues debe ser en este caso destituído de inmediato. O es que Ribó ha mentido a los vecinos.
«Lo único que pedimos a los políticos es que no nos mientan más y que cumplan con lo que dicen y prometen»
Los vecinos lo que quieren son soluciones y van a seguir luchando porque las palabras de los políticos y los compromisos no se los lleve el viento y se cumplan.
Por otra parte, el Ayuntamiento sigue desde mayo sin responder a la petición vecinal de estudio técnico de valorización de las naves realizada por una experta en patrimonio industrial. Ni siquiera ha atendido la petición vecinal ni del Síndic d’Agravis de catalogar los dos paneles cerámicos anteriores a 1.940 y por tanto BIC.
¿Este Ayuntamiento tiene alguna credibilidad?
Con todo esto, ¿nos podemos creer al alcalde?. Juzguen ustedes mismos. Lo que es evidente es que tanto Sandra Gómez y Elisa Valía han jugado con los vecinos desde el PSPV. Como también están haciendo Gloria Tello (Patrimonio), Lucía Beamud (actividades), y Sergio Campillo (vice-alcalde). estos últimos de Compromís.
Igual habría que preguntar la relación del arquitecto redactor del proyecto con el actual asesor de urbanismo del alcalde de Valencia, relación de amistad, ¿o quizá puede haber algo más?. Ahora las preguntas son evidentes… ¿Terminará este nuevo sainete como el anterior asesor de urbanismo Rafa Rubio?.
Rafa Rubio sigue imputado por «presunats» mordidas cuando era jefe de la oposición por «presuntamente» facilitar negocios de pelotazos urbanísticos en la Ciudad.
