La Casa por el Tejado

La Casa por el Tejado

La locución proverbial “no hay que empezar la casa por el tejado”, pone de manifiesto que debe mantenerse y seguirse un orden lógico, ya que, si se altera o invierte, nada se consigue. De hecho, la construcción de una casa requiere, en primer lugar, una buena cimentación. Después, son precisas diversas actuaciones, que culminan con la instalación del tejado.

Esa falta de orden y coherencia, así como de objetivos claros, caracterizan la política de la izquierda en materia de vivienda, si es que se puede decir que exista. Lejos de abordar con seriedad y compromiso el problema, se limitan a utilizar señuelos o fuegos de artificio, recurriendo, como en tantas ocasiones, a ayudas o subvenciones que no llegan o que son claramente insuficientes.

Por un lado, en la recta final de la legislatura, Pedro Sánchez anuncia una ley en materia de vivienda que pretende aprobar, “casualmente”, durante el desarrollo de la campaña electoral de mayo. Para ello, Pedro Sánchez se echa de nuevo a los brazos de los radicales e independentistas de Esquerra Republicana y Bildu.

Los miles de viviendas prometidas por el presidente son meros números que no van a ser una realidad inmediata, ni menos aún, solucionarán los problemas en las grandes ciudades, ya que el 70% de las viviendas “prometidas” está en pequeñas poblaciones.

  • Por su parte, los señuelos utilizados por el Gobierno del President Puig, tampoco han funcionado.

Recientemente se ha sabido que la Conselleria de Vivienda, dirigida por el podemita Héctor Illueca, ha dejado fuera del bono del alquiler joven en la convocatoria correspondiente al año pasado, a 13.000 jóvenes que lo solicitaron y reunían los requisitos para su obtención.

  • El mensaje que han recibido indica: “su solicitud ha sido desestimada por agotamiento del crédito.

Puede volver a solicitar la ayuda en la convocatoria de 2023… o lo que es lo mismo, “vuelva a jugar”, siga intentándolo, que nosotros somos incapaces de darle una solución porque los recursos los destinamos a otros fines lejanos a los de atender las necesidades de la ciudadanía.

Podemos y del Partido Socialista ven poco relevante ven el problema del acceso al alquiler de vivienda de la juventud, si solamente se presupuesta una cantidad que deja fuera al 80% de los solicitantes. Ni siquiera este “tejado” que quieren poner al problema de la vivienda ofrece soluciones, pues está lleno de innumerables goteras . De hecho, el gobierno del Botànic, como el Frankenstein nacional, hace aguas por todas partes y eso acrecienta su ineficacia.

Pero como la izquierda es la única capaz de tropezar dos veces en la misma piedra, a la Concejalía de Vivienda del Ayuntamiento de Valencia, dirigida por Isa Lozano, le ha pasado lo mismo. En 2021 se le agotó el crédito para las ayudas al alquiler dejando fuera a personas que reunían los requisitos para su obtención. Esta situación se ha vuelto a repetir en 2022, donde medio millar de personas han quedado excluidas a pesar de reunir los requisitos.

En definitiva, todos estos datos evidencian el fracaso de las políticas de la izquierda en materia de vivienda ajena, porque para casoplones como el de Pablo Iglesias e Irene Montero, no hay límite que valga.

Frente a todos estos despropósitos, Alberto Núñez Feijóo ha propuesto un pacto de Estado en la materia, con ayudas a la emancipación, avales para la compra de la primera vivienda o para la fianza del alquiler, así como más vivienda pública de alquiler. De igual manera, ha puesto sobre la mesa la necesidad de combatir en serio la “okupación”, llevando a cabo las reformas legislativas que no ha querido la izquierda para que el okupa sea desalojado en un plazo de veinticuatro horas, se refuercen las penas por la comisión de este delito, o se considere nula su inscripción en el padrón municipal correspondiente a la vivienda ocupada.

  • Es hora de poner fin a la tolerancia de la izquierda con la ocupación y es preciso demostrar más empatía con el propietario cuya vivienda ha sido ocupada, sin que tenga que pagar el IBI, o el impuesto de patrimonio, tal y como propone el Partido Popular.

Carlos Mazón, presidente del Partido Popular de la Comunitat Valenciana y candidato a la Generaltiat hace ya meses que presentó sus propuestas para hacer frente al problema de la vivienda. Así se construyen los cimientos que permitirán levantar de nuevo nuestra Comunitat.

Con los objetivos por alcanzar bien claros, el próximo 28 de mayo, los resultados de las urnas lanzarán a Puig y a Ribó el mensaje de que se les ha agotado el “crédito electoral”, Su voluntad de renovar la presidencia de la Generalitat o la alcaldía de Valencia, respectivamente, será desatendida por la ciudadanía. Ha llegado el momento en que el Partido Popular ponga orden en este tema y tantos otros que deja en herencia la izquierda.

Puig y Ribó, “game over”, pero dejen de hacerlo con el dinero y las ilusiones de los valencianos y valencianas.