Las naves de la Calles Guala que quieren derribar de autores relevantes que informes de «expertos» han omitido

Un reciente estudio de César Guardeño Gil, presidente del Círculo de defensa del Patrimonio y de Victor M. Cantero Solís sobre la autoría de las naves de la Calle Guala del barrio de San Antonio en la Zaidía han dado con los arquitectos del proyecto.
Las controvertidas naves industriales que la propiedad quiere derribar para construir 6 edificios en su lugar que darán origen a el mayor macrohotel-residencia de estudiantes de Valencia.
Han descubierto los planos originales y documentos inéditos sobre la construcciónd e los edificios y sus peculiaridades.

Estudio del Círculo del Patrimonio

Sorprende que los autores de los informes realizados por el Consell Valencià de Cultura y la Real Academia de Bellas Artes hayan pasado por alto, por acción u omisión, la autoría de las naves situadas en la calle Guala nº3. Ya que los expedientes de la Fábrica de hilados, trenzados y tejidos de yute de Pilar Casanova pueden consultarse en el Archivo Histórico Municipal de Valencia. O bien lo desconocían o bien han preferido omitir los nombres de los arquitectos, conocedores de su gran relevancia.

En el AHMV aparece el proyecto del año 1935 firmado por el arquitecto valenciano, Antonio Gómez Davó, autor de la Sucursal de la Caja de Ahorros de la calle Calabazas, la oficina principal de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Valencia situada en la plaza Tetuán, esquina calle del Mar, el Banco de Valencia o el edificio de la Cigüeña, entre otros. 

 Los autores de esta investigación también han encontrado los proyectos de 1941 y de 1955, para la construcción de nuevos pabellones y para la ampliación de naves de la fábrica de Pilar Casanova Esteve. Ambos están firmados por el arquitecto José Luís Testor Gómez, uno de los tres autores que firmó la mayoría de refugios antiaéreos de la ciudad (junto a Luis Costa Serrano y al ya mencionado Antonio Gómez Davo). Refugios como el del Instituto Luís Vives o el del Ayuntamiento de Valencia llevan su firma, además del balcón del edificio consistorial, adaptando el diseño realizado por Francisco Mora Berenguer.

Tal y como apunta la Dra. Arquitecta y especialista en patrimonio industrial, Diana Sánchez Mustieles, en su Tesis doctoral «Metodología para la recuperación y puesta en valor del patrimonio industrial arquitectónico. Antiguas fábricas del Grao de Valencia», publicada en 2013 por la Editorial Universitat Politècnica de València, uno de los valores añadidos a las construcciones industriales es precisamente el «valor por su autoría». 

Autores relevantes de las edificaciones pasados por alto por las autoridades

Y el hecho que una antigua edificación industrial tenga un autor o autores relevantes, como en el caso de Antonio Gómez Davó y José Luís Testor Gómez, es representativo para la historia de la arquitectura y de la técnica, que ha dejado además un testimonio único de su producción asociado a una época, estilo o tendencia. 

El hecho de que unas naves industriales estén firmadas por estos dos arquitectos tan significativos e importantes en la ciudad de Valencia ofrece un valor añadido a la  Fábrica de hilados, trenzados y tejidos de yute de Pilar Casanova y un motivo más que suficiente para su catalogación y conservación como Bien de Relevancia Local, tal y como vienen pidiendo los vecinos de San Antonio y las asociaciones y colectivos de defensa del patrimonio de la ciudad.

 Desde Círculo por la Defensa del Patrimonio consideran que las naves de la calle Guala nº3 incorporan, en las preexistencias que actualmente la conforman, con evidencia palmaria y sin un especial esfuerzo interpretativo, valores históricos, arquitectónicos, etnológicos, por su vinculación con la red hidráulica de Valencia a través de la acequia de Rascanya (BRL) y por la autoría de las mismas, en grado particularmente significativo.

Cabe señalar que no se conocen más proyectos de ambos autores vinculados a la construcción de patrimonio industrial en la ciudad de Valencia, tratándose pues de un ejemplo único e irrepetible que se debe preservar.