El Ayuntamiento de Valencia tiene un remanente de 70 millones en el 2021 y destinará 23,7 millones a amortizar deuda

El Ayuntamiento de Valencia ha presentado unas cuentas con un remanente de 70 millones de euros.

El alcalde Joan Ribó habla de la «solvencia de las cuentas municipales». Asegurando que

“Hemos sido capaces de llevar a cabo una gestión muy solvente, y por eso tenemos un importante remanente de tesorería».

El alcalde ha presnetado estas cuentas junto con el concejal de Hacienda Borja sanjuán (PSPV). Pero se le ha olvidado hablar de que la ejecución presupuestaria de las inversiones previstas es cada vez menor en el Ayuntamiento de Valencia. Así, 2021 se cerró con menos de un 40% de ejecución de las obras previstas en cuanto a inversioens en el presupuesto municipal.

Un capítulo de inversiones que año a año se reduce su ejecución presupuestaria. Ejecutando cada año menor porcentaje. Tampoco habla ni el alcalde ni el concejal de Hacienda del aumento de ingresos derivado de la fuerte subida de impuestos y tasas municipales tras la pandemia y que le ha hecho recaudar mucho más este pasado año.

El remanente presupuestario se utilizará en gran parte para amortizar deuda

A pesar de las extremas necesidades de los ciudadanos y su empobrecimiento acelerado, el gobierno municipal de Joan Ribó y Sandra Gómez vuelve a utilizar gran parte de los remanentes para amortizar deuda.

El alcalde se ha detenido en describir la evolución del endeudamiento del Ayuntamiento en los últimos años. “Porque éste es el indicador clave de la eficacia y la solvencia de este gobierno”. “Nos encontramos un ayuntamiento con una deuda de 784 millones de euros de un presupuesto de 738 millones, es decir, más del 100% de deuda”, ha recordado Ribó. “Pero ahora estamos con una deuda que no llega al 30%, según las previsiones de 2022, y eso sin contabilizar los 23 millones que se amortizarán con este modificado”. “Por tanto –ha argumentado el alcalde- la cosa cambiado significativamente: de más de un 100% de deuda a estar por debajo del 30 %”.

El PSPV de sandra Gómez y Borja Sanjuán renegó del alcalde en ejercicios pasados por aplicar ese remanente a amortizar deuda y no a apoyar a los ciudadanos. Ahora permite una amortización anticipada de préstamos por importe de 23.760.222 euros.

El resto del remanente

Del resto del remanente municipal, un total de 58,9 millones de euros se destinarán específicamente para inversiones y ayudas de diferente tipo. Así como para solventar emergencias.

El alcalde ha recordado que Valencia “es una ciudad solidaria” y ha recordado la reserva de 1,4 millones de euros (1.392.285 €) que se destinarán a habilitar los recursos necesarios (alojamiento, manutención y atención psicosocial) para atender a personas de origen ucraniano refugiadas de la guerra. La iniciativa incluye también la prestación de asistencia jurídica y asistencia psicológica a la población acogida. Así como apoyo a los menores recién llegados a la ciudad de Valencia desde Ucrania, ha explicado Ribó.

Inyección de 11 millones de euros más en la EMT

Asimismo, la reserva económica permitirá apoyar a la Empresa Municipal de Transportes, EMT, con una inyección de 11 millones. Tanto para paliar los efectos de la caída del pasaje durante los peores momentos de la pandemia (6,1 millones). Como para afrontar el aumento del precio de los carburantes (4,8 millones).

También se dedicará una parte importante del montante (22,8 millones) a la expropiación de terrenos para aumentar las dotaciones públicas. Por ejemplo, han señalado Ribó y Sanjuán, se prevén acciones como la conclusión de la urbanización de la parte final de Blasco Ibáñez, vinculada al desarrollo del Cabanyal. También la ampliación del Parque de La Rambleta. Además de la adecuación de una zona verde en la calle de Ramón Perelló.

Y, en este contexto, el alcalde ha destacado la partida de 5 millones de euros para la adquisición de determinados bienes, como será el caso del Palau de Montortal. Un Palacio sito junto al Palacio de Cervelló, sede del Archivo Histórico Municipal, que servirá precisamente para acometer la ampliación del Archivo (unos dos millones y medio). Así como posibles adquisiciones de nuevas viviendas o de nuevas instalaciones para el municipio, como por ejemplo la antigua Delegación de Hacienda.

Ribó compara la carga impositiva de Valencia y Madrid manipulando las cifras a su conveniencia

“Si alguien habla de impuestos –ha añadido- hay que decirle que hemos sido capaces de sanear las cuentas con un nivel impositivo por debajo de las grandes ciudades del Estado, como por ejemplo, Madrid”. Pero Ribó no tiene en cuenta que el salario medio de Madrid es muy superior al de Valencia. Así sólo compara en ambas ciudades los datos de manera interesada y evita comparar en igualdad de condiciones. El nivel de vida en Madrid es muy superior, con unos salarios más de un 20% superiores a los salarios de los valencianos y con una renta per cápita muy superior a la de los valencianos.