Decenas de vecinos se vuelven a concentrar en Orriols exigiendo soluciones a las Administraciones

Anoche decenas de vecinos se concentraron de nuevo en Orriols exigiendo a als Administracioens Públicas soluciones ante la delincuencia en el barrio.

De nuevo bajo el lema «Con delincuencia no hay convivencia» decenas de vecinos desafiaron al frío y a las amenazas de los delincuentes y se concentraron para exigir soluciones. Unas soluciones que tan sólo llegan a medias y tras mucha palabrería de Ribó no ven el final de su largo calvario.

Orriols es un barrio pacífico, trabajador, intercultural, que nunca ha destacado por problemas de conviviencia. pero desde hace unos años, sus vecinos soporta delincuencia, violencia y drogas. Tras las últimas crisis se han detectado más de 100 viviendas ocupadas ilegalmente. La mayoría en poder de los bancos. Muchas de ellas ocupadas por delincuentes que las han convertido en narcosalas y espacio de delincuencia. Todo ello ocasiona múltiples problemas en el barrio.

La Policía Local a finales de diciembre comenzó el envío de cartas a sus propietarios y también tras muchas concentraciones han aumentado la presencia policial en la calle. Pero los vecinos creen que no es suficiente. Así, destacan que por las noches y los fines de semana donde la presencia es menor, vuelve la violencia a las calles de este hasta ahora tranquilo barrio del Cap i Casal.

Los vecinos atemorizados

El pasado 18 de enero, la líder vecinal, que va en silla de rudas fue amenazada de manera intolerable por varios delincuentes que le recriminaron su lucha contra esta delincuencia. Un actitud completamente intolerable. Ahora además hay miedo, los vecinso tienen miedo y el Ayuntamiento y Delegación del Gobienro han de redoblar sus esfuerzos por retornar la paz y la convivencia que nunco debió abandonar el barrio.

Los vecinos también se han concentrado hace unos días a las puertas de la Delegación del Gobierno y recuerdan a la Delegada Gloria Calero que hace tiempo del envío de su carta pidiéndole una reunión para explicarle sus problemas. Una petición que aún no ha sido atendida según relatan los propios vecinos. Es hora de apoyar a los vecinos y de expulsar a los delincuentes de las calles y que las autoridades hagan su trabajo para proteger a los vecinos.