José Luis Aguirre: “Hay que olvidarse de ideologías y sectarismos, lo que necesita el sector primario es sentido común”

José Luis Aguirre Larrauri, valenciano nacido en 1961, ingeniero técnico agrícola y conseller de Agricultura, Ganadería y Pesca, diputado de Vox por la provincia de Valencia en la pasada legislatura.

El Conseller, persona afable y cercana, nos recibió en su despacho para tratar, de manera muy personal, sus sensaciones durante estos primeros meses a cargo de la Conselleria, la problemática que tiene el sector primario en la Comunidad Valenciana y las soluciones a la misma

VN – ¿Cómo se encontró el sector los primeros meses de mandato?

JLA – Es algo que me sorprendió, cuando en todas las quinielas aparecía mi nombre como posible Conseller de Agricultura. Yo tenía mi vida profesional y prefería seguir en mi puesto como diputado y presidente de la comisión de agricultura, pensaba que podía hacer ahí una buena labor, tampoco entraba dentro de mis aspiraciones dedicarme a la política hace 5 o 6 años.

Fueron precisamente las reuniones con agricultores, ganaderos y pescadores durante los meses anteriores lo que nos motivó más para trabajar en revertir la situación.

  • El sector está desesperado, hundido.

Cada vez que vamos, desde que soy Conseller, a una reunión a una explotación ganadera, agrícola…, emociona; te das cuenta del impulso y las ganas que tienen de que se produzca un cambio en las políticas de un sector desesperado, hundido.

Es algo que ocurre con todo el sector primario; por ejemplo: hablando hace unos días sobre el sector pesquero, nos encontramos con que carecen totalmente de expectativa alguna.

La gente está sin ilusión y nos dicen que somos su última esperanza, su tabla de salvación para poder salir adelante.

  • El Sector primario es un sector muy sacrificado que exige trabajo y atención 365 días al año.

Este es precisamente nuestro principal reto, volver a generar esperanza a agricultores, ganaderos y pescadores, que vean una opción de futuro y que se produzca el necesario relevo generacional. Tenemos que proporcionarles las herramientas necesarias para que sus explotaciones sean rentables y que éstas les permitan vivir de una manera digna.

VN – Vox está en contra de lo que significa para el sector la Agenda 2030, ¿nos lo puede explicar de modo que la gente lo entienda mejor, al margen de slogans, logotipos, etc.?

JLA – La agenda 2030 y sus objetivos de desarrollo sostenible, todos muy bonitos en principio y que cualquier persona suscribiría, pero no hace más que crear el caldo de cultivo para demonizar precisamente al sector primario.

Cada vez que se justifica cualquier actuación de Europa por algún incumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible, se está haciendo justo lo contrario. Lo que están provocando es la imposibilidad de que agricultores, ganaderos y pescadores puedan salir adelante con sus negocios.

Los principales garantes del clima, de que el monte y el campo estén en las mejores condiciones y que el mar sea sostenible, son los ganaderos, los pescadores y los agricultores.

Lo que verdaderamente se está haciendo con estas políticas globalistas, es no permitir al sector primario utilizar las herramientas para poner en marcha sus explotaciones, no se les permite producir, se les demoniza, se les culpa de la contaminación y de cualquier situación que pueda afectar al clima.

VN – ¿Se considera un conseller cercano?

JLA – Pienso que sí, además mi primer objetivo, ha sido escuchar.

Cuando tomé posesión del cargo lo más importante para mí era escuchar al sector, a cada uno de los sectores, en cada rincón de nuestra comunidad. Es básico saber escuchar para conocer los problemas y poder aportar soluciones. Creo que sí, que el sector me considera muy cercano.

La gente está muy contenta de tener a alguien que habla su mismo idioma, que les entiende, y piensan que es un paso importante para poder encontrar soluciones a los muchos problemas que tienen en sus explotaciones.

VN – ¿Es conocedor el sector primario, dado que estamos en Europa, que hay algunas cosas que se pueden hacer desde aquí y otras muchas se deciden fuera?

JLA – Son cada vez más conscientes de ello, pero es verdad que se lo tenemos que explicar mejor.  Son muchas las situaciones que no entienden por qué se producen, sobre todo en cuanto a las restricciones de productos fitosanitarios que pueden utilizar en sus explotaciones.

Nosotros tenemos que hacerles llegar toda esa información y explicársela, pero también debemos presionar al Ministerio para que en los asuntos correspondientes sean capaces de proteger a nuestro sector primario, que sepan defender nuestras fronteras para que no entren productos con enfermedades, que además de hacer una competencia desleal a los nuestros, pueden acarrearnos plagas para las que no estamos preparados.


  • Esto puede suponer el fin del sector citrícola o de otros cultivos agrícolas muy importantes en nuestra comunidad

Nuestra obligación es informar y formar a los técnicos y profesionales del sector, de sus derechos, de aquello que pueden pedir a Europa y cuáles son las limitaciones.

Defender la reciprocidad ante algunos productos que no se pueden utilizar y que realmente nos cuesta encontrar alternativas o directamente no las hay. El tema de triciclazol es muy importante, un fungicida muy importante para el cultivo del arroz, concretamente en la Albufera y especialmente para alguna variedad como el arroz Bomba. Este año ha habido una especial carencia de éste, que es el más utilizado para hacer paella valenciana, precisamente por no poder utilizarlo.

Los agricultores sin poder usarlo no pueden hacer frente a la pyricularia y por este motivo la producción de arroz y especialmente de esta variedad se ha visto muy reducida.

Siendo este el problema, lo grave es que Europa sabiendo que existía una necesidad de producto, permitió la importación de arroz de países terceros, sin exigir las mismas condiciones que se les exigía a los arroceros valencianos y europeos.

Y fue precisamente ante la alerta de determinadas asociaciones agrarias, que decidimos escribir a todos los europarlamentarios una carta explicándoles cual era el problema, las limitaciones que tienen los agricultores europeos para utilizar determinados productos, en este caso el triciclazol, y la decisión de la comisión de importar arroz sin atender a estos mismos límites máximos de residuos admitidos.

Estuvimos en Bruselas, comparecimos en rueda de prensa con el Grupo Parlamentario VOX en Europa  para explicar esto.. También nos reunimos con el comisario europeo y con representantes de asociaciones agrícolas europeas, aquellas reuniones fueron exitosas, tanto que  a mediados de diciembre se votó en contra de la importación de arroz de países terceros que no cumplan los mismos requisitos que los nuestros.

Un gran éxito de la agricultura valenciana de la que podemos sentirnos muy orgullosos y nos indica cuál es el camino para defender al sector.

VN – ¿Cuál es el posicionamiento de la Conselleria con respecto a las interceptaciones de productos infectados de terceros países?

JLA – Al tratarse de una competencia del Ministerio, desde que llegamos a esta Conselleria nos hemos estado comunicando con éste, haciéndole saber nuestras inquietudes con respecto a estas interceptaciones de productos que no cumplen los requisitos o que vienen con plagas, para que sean conocedores del problema; yo no sé cuántas cartas hemos mandado pero no menos de 7 u 8, unas por problemas concretos de la Comunidad Valenciana y algunas otras  en colaboración con el Gobierno de Aragón, Castilla León y Extremadura.

  • Solamente hemos tenido una reunión con el Ministro y sin orden del día y así no se pueden tomar decisiones.

Lo hemos hecho también con el problema del llamado COVID de las vacas, el EHE, para lo que exigimos la obligatoriedad de establecer una vacuna; el Ministro en la reunión que mantuvimos nos decía que no existe, obviamente porque no se ha investigado para que exista, en cuanto el Ministerio genere esa necesidad, si declara la obligatoriedad, hay laboratorios que están esperando sólo que esa vacuna sea rentable. Cuanto antes se empiece a trabajar en ello, antes obtendremos resultados.

VN – ¿Cuál es su valoración del primer encuentro de Ganadería extensiva en alta montaña celebrado en Morella?

JLA – Fue muy importante para nosotros porque, como decía antes, sentimos la necesidad de escuchar, de saber qué problemas tiene el sector.

Constatamos que muchas veces al ganadero no comprende la información que necesitamos, por ejemplo: lo importante que es declarar cuando una vaca resulta infectada por la EHE, muchos a lo mejor por miedo para no tener problemas en las explotaciones o a la hora de comercializar la carne, no declaraban.

Y es esencial, el Ministro nos ha requerido para que le digamos el número de animales infectados para poder valorar la situación.

Nos hemos dado cuenta de que hay una importante falta de información, por lo que allí valoramos realizar una serie de cursos y charlas para veterinarios y ganaderos, con el fin de acercarles las políticas de la Conselleria en este campo, cuáles son las líneas de ayuda para la ganadería extensiva y ecológica, que las hay, y estamos empeñados en que estas ayudas les lleguen.

Aunque tenemos un presupuesto muy ajustado, nuestro objetivo es que se ejecute totalmente y, para ello, el sector tiene que conocer, estar informado y asesorado para acceder a dichas ayudas.

  • No es aceptable que importantes cantidades de dinero de apoyo al sector, no se hayan podido ejecutar porque los interesados no las conocían.

Para esto ya nos estamos reuniendo con regantes, alcaldes, etc., para informarles de las ayudas existentes y cómo pueden acceder a ellas, tal como ocurrió con el plan Renhace que se quedó prácticamente sin ejecutar por desconocimiento.

VN – ¿Van a consolidar la celebración del salón del Toro y el Caballo?

JLA – Ese es nuestro objetivo, nos hemos reunido con el sector, del mundo del caballo y del toro para revitalizar esa feria, queremos la implicación de otras administraciones y el sector lo está viendo con muy buenos ojos.

  • Es muy importante unir estos sectores como una forma de acercar el mundo rural al mundo urbano.

Se hacía tradicionalmente en la feria de muestras y era una estupenda ocasión para que la gente de la ciudad se acercara a ver cómo son los mundos de las ganaderías.

No podemos obviar que tiene unos costes importantes derivados del transporte especial que requiere el ganado, estamos dispuestos a asumir el reto y vamos a hacerlo.

VN – Subvenciones a la sequía, ¿cuál fue el problema?

JLA – El Ministerio sacó unas líneas de ayudas para determinados cultivos y algunos de ellos se quedaron sin ellas dado que no estaban contemplados.

Determinadas comunidades autónomas lanzaron ayudas con fondos propios para apoyar a estos cultivos que no estaban incluidos; nosotros hemos heredado unos presupuestos que no lo contemplaban y las cantidades que íbamos a poder ofrecer eran tan escasas que no merecía la pena hacerlo, el coste de tramitación hubiera sido superior a las ayudas.

Por ese motivo, nosotros para el 2024 y aprendiendo de los errores, (en este caso no lo hicieron bien), hemos previsto un fondo para este tipo de contingencias.

VN – ¿Cómo encontró al sector pesquero ?

JLA – El sector pesquero tiene grandes problemas: por una parte, el descenso en el consumo de pescado y por otra, los condicionamientos que pone Europa.

En el último acuerdo pesquero del consejo de Ministros, en el que tuvimos la oportunidad de participar, se decidió una restricción de días de pesca en el Mediterráneo del 9,5%, lo que supone que en los 3 últimos años se han incrementado los días de parada en más de un 40%.

  • Es imposible en cualquier sector trabajando el 40% menos de los días pueda sacar adelante un negocio.

Especialmente cuando esas paradas se cobran a año vencido que es lo que está ocurriendo ahora.

Estamos actuando ante este problema en varios frentes: por una parte y gracias a las reuniones que nuestro director general está teniendo con el sector, tanto en Madrid como en Bruselas, hemos podido constatar que, por ejemplo, en Andalucía las ayudas se pagan en cuestión de semanas. Estamos en contacto con esta comunidad para conocer las aplicaciones informáticas que utilizan con el fin de aplicarlas en la nuestra y que nuestros pescadores puedan cobrar estas paradas en un tiempo razonable.

Por otra parte, le hemos propuesto al Ministro determinadas medidas para mejorar las condiciones de los pescadores. Sabemos que como está actualmente estructurado el sector no es rentable para ellos.

Tenemos también la flota de arrastre, una de las grandes castigadas por las medidas medioambientalistas de la Comisión Europea. Disponemos de una flota de 33 buques de madera, y en estos momentos no existen calafateadores que las reparen.  Las compañías aseguradoras son muy reticentes a asegurarlos, por lo tanto, atendiendo al material del que están construidos, a la falta de renovación generacional y la edad media que es muy alta, lo que le solicitamos al Ministro es que habilite ayudas para el desguace racional y selectivo de la flota.

  • El sector no quiere subvenciones, lo que quiere es trabajar, pero si no puede hacerlo, habrá que ayudarles y aportar soluciones.

Si se desguazaran estos buques que tienen asignados cada uno de ellos 120 días de pesca, se podrían disponer de unos 4.000 días de pesca de los que se podrían favorecer el resto de la flota y podría hacer más rentable su trabajo.

Por otra parte, la renovación de dicha flota, (somos todos conscientes de esa necesidad), permitiría disponer de una reserva de motorización, de caballaje, motores que contaminarían menos para contribuir a que el Mediterráneo fuera más sostenible.

No hay que olvidar que los pescadores son los primeros interesados en poder seguir viviendo y comiendo del mar.

VN – ¿Qué le ocurre al campo valenciano?

JLA – El campo valenciano tiene un problema estructural muy grave heredado de hace muchos años, que no se ha sabido gestionar por los diferentes gobiernos que hemos tenido. Es algo que tenemos que afrontar de una manera seria y decidida.

Se intentó hacer algo con la Ley de Estructuras Agrarias hace dos legislaturas, que podía ser buena, pero que no se ha sabido desarrollar.

Esa Ley estrella de aquel Botánico 1 y que posteriormente el Botánico 2 se olvidó de ella, ni la reglamentó, ni la presupuestó, ni puso las medidas para que esto saliera adelante.

Nosotros hemos propuesto y estamos trabajando ya desde la Dirección General de Producción Agrícola y Ganadera, el desarrollo y actualización de esta ley con criterios técnicos.

Hay que olvidarse de ideologías y sectarismos, lo que necesita la agricultura, la ganadería y la pesca, lo que necesita el sector primario, es sentido común.

Y eso es lo que estamos tratando de hacer, no tiene sentido seguir manteniendo esa estructura minifundista que tenemos y hay que poner los medios para que el propio sector se redimensione. Es fundamental para que el sector sobreviva, para que no se abandonen los campos y que el sector sea rentable.

Si conseguimos fijar los incentivos para que las explotaciones puedan ir ampliándose, para fomentar el cultivo en común, las reordenaciones y agrupaciones parcelarias, conseguiremos que sean rentables.

  • Queremos fomentar la recuperación de parcelas abandonadas en todos los municipios, pero especialmente en los de interior y montaña.

Sabemos que son una barrera esencial contra la desertificación, un aliado fundamental en la lucha contra los incendios, ya que las zonas de cultivo suponen frenos para los incendios.

Tenemos que afrontar todo el tema de plagas, plantar cultivos más resistentes etc. Todo esto supondría una lucha real y seria contra la despoblación, es la manera de que la gente quiera quedarse en el campo, siempre que haya una rentabilidad.

  • La Ley de Cadena no funciona, hay que ponerle el cascabel al gato.

Hay que poner de acuerdo al sector, cuáles son los costes de producción, hay que conciliar al productor, al agente que pone el producto a disposición del consumidor y al consumidor mismo.

  • Si queremos una Europa verde, tenemos que defender a nuestros agricultores.

Pero hay que ir más allá, hay que recordarle al Ministro que tiene que explicar en la Unión Europea que, si queremos una Europa verde, tenemos que defender a nuestros agricultores, hay que defender nuestro sector primario.

Si el agricultor no consigue rentabilidad tendremos alrededor de nuestras ciudades auténticos secarrales y mayor riesgo de incendios. Si nuestro agricultor gana dinero, sin costarnos nada a los demás, tendremos unos cinturones verdes alrededor de todos nuestros municipios.

  • Hay que defender la producción nacional frente a la producción de terceros países y hay que hacerlo con las medidas que sean necesarias.

No tiene ningún sentido crear un club de amigos donde unos perjudiquen a otros, no sólo hay que apoyar la venta de tecnología, de vehículos etc., sino también lo que producimos.

Hace poco hemos sufrido una pandemia y hemos valorado muchísimo el poder disponer de una producción agrícola, ganadera y pesquera propia, que nos sirvió para que no hubiera desabastecimiento.

  • Hemos tenido un sector valiente al que no se le ha aplaudido suficiente y del que parece que ya nos hemos olvidado.

Funcionó, los agricultores no dejaron de trabajar, los pescadores tampoco, a pesar de esas medidas absurdas de ir sólo dos en cada coche para luego mezclarse en el barco, sin EPI, sin protecciones adecuadas…

Si no somos capaces de conseguir la soberanía alimentaria estamos condenados a fracasar. Tenemos, por lo tanto, que defender al productor. Es además el que se va a preocupar de que tengamos un medio ambiente digno, una Europa verde, y para conseguirlo debemos de apoyarlos para poder vivir dignamente de ello.