Ayer se concentraron nuevamente los sanitarios del Hospital de La Ribera. Esta vez era una convocatoria de sanitarios a nivel nacional secundada en toda España. Los sanitarios piden medios y personal para afrontar este segunda oleada que se nos viene encima.
Denuncian los sanitarios una precariedad laboral excesiva, necesitan medios para afrontar la previsible segunda oleada de casos y no quieren que se repitan los errores del pasado. Necesitan personal para poder descansar y una apuesta real de las instituciones públicas a favor de la sanidad.
Los problemas del Hospital de Alzira
Desde la reversión del Departamento de Salud de La Ribera, abora ya dependiente de la consellería de Sanitat Universal los problemas se acumulan.
El personal sanitario es personal laboral ya que fue asumido el de la concesionaria. Pero llevan ya casi tres años sin negocial el convenio laboral que expiró hace ya varios años.
Además añade la falta de personal y denuncian la pésima gestión del Hospital y del Departamento de Salud por un Gerente que obvia sus reivindicaciones y necesidades. La Consellería de Sanitat no se ha reunido con colectivos preocupados y con reivindicaciones que se acumulan de tiempo.
El servicio de urgencias lleva meses concentrándose por una atención de calidad al paciente y por unos turnos laborales que les permita la conciliación familiar. Necesitan descansos y guardias más razonables. Para ello exigen un cambio en los turnos y necesitan la contratación de más personal.
En el módulo central, la unidad de preingresos hospitalarios costó 170.000€ y tiene personal adscrito. Pero se cierra y abre en función de la voluntad de la gerencia y su personal es derivado a otros servicios hospitalarios.
Sigue sin tener un circuito COVID diferenciado en URGENCIAS
Problemas tan gravez y básicos como que desde le inicio de la pandemia llevan demandando, como establece el protocolo un circuito COVID o de pacientes respiratorios diferenciado del resto de pacientes en el Hospital de La Ribera, hoy inexistente.
Las urgencias se saturan y existe numersos retrasos acumulados en las intervenciones quiúlgicas programadas. Solicitan igual que otros colectivos de sanitarios que los aplausos se conviertan en derechos y en compromisos y actuaciones reales.