¿Cómo será el regreso de Puigdemont?

Enrique Arias Vega: ¿Cómo será el regreso de Puigdemont?

Entre las muchas mentiras que Pedro Sánchez lleva dichas en estos cinco años está la de que el traería a España a Puigdemont para ser puesto a disposición de la justicia.

Ahora sabemos que eso no será así, a tenor de la ley de amnistía que se prepara, por la que Puigdemont y sus congéneres no habrían cometido ningún delito ni durante la revolución del 1 de Octubre ni en las jornadas que la precedieron y la siguieron. En consecuencia, el ex presidente de la Generalitat podrá volver libremente, como quiera y cuando quiera. Es más, después de seis años de huido de la justicia —exiliado, según sus partidarios—, lo lógico es que vuelva en loor de multitud, acogido por sus cientos de miles de devotos independentistas como un héroe que ha sido capaz de doblar la mano al Estado español.

Un recibimiento así de multitudinario contrasta a más no poder con la reconciliación en Cataluña que esgrime el Gobierno central para justificar la amnistía. Según el Ejecutivo, se trata de devolver al terreno de la política lo que nunca debió de judicializarse. ¿Pero qué significa volver a hacer política? ¿Volver a las andadas de la Declaración Unilateral de independencia y otras salvajadas de un pasado bien reciente?

No  olvidemos que la amnistía conlleva partir de cero y que hacer lo que se hizo es política y no subversión. En consecuencia, que se puede volver a hacer sin reproche penal alguno. Mal camino es ese, pues, para llevar a la reconciliación de los catalanes entre sí y a la concordia del independentismo con las instituciones del Estado. Más bien es todo lo contrario. El regreso de Puigdemont libre de toda causa es el ejemplo evidente de que todo se puede hacer contra el Estado español porque al fin y al cabo todo es política y ésta no merece sanción alguna.

A Contracorriente
Enrique Arias Vega