La Cátedra de Empresa Familiar (CEFUV) presenta un nuevo Cuaderno de Trabajo titulado “Los órganos e instrumentos de gobierno de la familia”

– Elaborado por Tomás Guillén, director general de Grupo IFEDES, y Alejandro Escribá, Catedrático la Universitat de Valencia y director de la Cátedra de Empresa Familiar.

El Cuaderno forma parte de los trabajos y actividades de divulgación de la CEFUV, promovida por la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), la Escuela de Empresarios (EDEM), el Instituto Valenciano para el Estudio de la Empresa Familiar (IVEFA), el Instituto de la Empresa Familiar (IEF) y la Universitat de Valencia (UV), y que cuenta con el patrocinio de CaixaBank y Broseta.

Este cuaderno resalta la importancia de los órganos de gobierno y su rol en la continuidad en las empresas familiares poniendo de manifiesto que actualmente los órganos de familia son muy poco utilizados, menos del 15% de las empresas familiares tienen consejos de familias o protocolos. Por ello, el objetivo del cuaderno es aproximar a las familias empresarias las características y funciones de los principales órganos y herramientas que son útiles para gobernar o gestionar la relación entre la familia y la empresa o las empresas familiares que son de su propiedad.

Guillén y Escribá explican que la Asamblea Familiar, órgano de riguroso carácter familiar, tiene dos funciones relevantes: promover los valores en el seno familiar y reflexionar sobre los intereses de la familia. Su funcionamiento y efectividad debe apoyarse en una serie de aspectos clave: la comunicación, la escucha continua a los miembros de la familia, el debate sobre propuestas de otros órganos y la cohesión de los valores familiares a la empresa.

Por su parte, el Consejo Familiar es uno de los órganos de gobierno familiar que está ganando más popularidad, en tanto que es muy útil como herramienta de unión y conexión entre la familia y la empresa. Los autores identifican dos ámbitos en sus funciones: ámbito de organización y el ámbito de las emociones. En este consejo deben estar representadas todas las partes de la familia involucradas en la empresa, sin tener en cuenta si estos familiares desempeñan una actividad laboral o no dentro de la empresa.

También presentan las Family Office como un instrumento de inversión y de gestión del legado familiar que se crea con el fin de dar servicio tanto a la empresa como a la familia, y debe estar separado del negocio principal. Este órgano suele desempeñar diferentes funciones como la gestión del patrimonio familiar, las inversiones y transacciones intrafamiliares, así como la atención a los impuestos, seguros y asesoramiento debido a las familias empresarias.

Por último, presentan los principales rasgos del Protocolo Familiar que, sin ser un órgano de gobierno, es una herramienta útil con la que la familia establece por escrito los temas y acuerdos en los que desea tener una reglamentación, sirviendo así de apoyo al gobierno de la relación familia-empresa. Cuando se elabora a partir del acuerdo y la comunicación continua (a menudo logrados en el consejo de familia), y se mantiene vivo a través de revisiones periódicas, se convierte en una herramienta muy útil para la prevención y resolución de conflictos.

Como conclusión, se destaca que el uso de unos u otros órganos de gobierno de la relación familia-empresa depende de las preferencias, necesidades y características de cada familia empresaria y así como de las características de su proyecto empresarial. Cada una encontrará entre ellas, aquellas opciones que le pueden resultar más útiles para comenzar a andar el camino.