Nueva polémica entre el PSPV y Compromís por la gigafactoría de Sagunto, ahora por la planta fotovoltáica

Lo de la Gigafactoría de Sagunt y su implantación en la Comunitat Valenciana se está convirtiendo en una rgumento de una película de Berlanga. Pero nada más lejos de la realidad. La realidad valenciana supera siempre la más sorprendente ficción para desesperación de los valencianos.

Si primero fue el Estado el que debía garantizar unas subvenciones por el PERTE eléctrico y estuvieron en el aire, con lo que la multinacional se llegó a replantear el proyecto, ahora la gigafactoría que suministrará hasta un 15% de la energía a la planta es el nuevo caballo de batalla entre Compromís y el PSPV.

A Chimo Puig le han colado otro gol por la escuadra los de Compromís

Al President le han colado otro gol más. Esta vez Compromís logró sacar adelante una resolución en el Ajuntament de Sagunt, gobernado por el socialista Darío Moreno Lerga con apoyo de Compromís y de Esquerra Unida contra la planta fotovoltáica asociada a la construcción de la gigafactoría.

El Plan lo han tumbado a nivel municipal tanto Compromís como el propio PSPV de Chimo Puig. Es la segunda vez que se consigue trocear la planta fotovoltáica. Una inversión necesaria, que ocupará todo el techo de la fábrica de baterías epro también hectáreas de terrenos colindantes. Una inversión necesaria para así garantizar el suministro eléctrico de la nueva fábrica. Ya que las previsiones de Iberdrola y del propio Grupo Volkswagen señalan que supondrá hasta un 15% del consumo de la propia fábrica.

La Generalitat Valenciana tras el no del consistorio municipal, se abre a producir nuevos cambios en el proyecto, pero señalan que el proyecto es necesario.

El futuro de la energía en la Comunitat Valenciana

Por una parte, hoy un tercio de la energía eléctrica que se consume en la Comunitat Valenciana la produce la central nuclear de Cofrentes. Una Central nuclear que ya tiene fecha de cierre: noviembre de 2030. Esto supone que tenemos menos de ocho años para implementar nuevas formas de producción de energía. Esto con el freno desde Compromís a la implementación de renovables en la Comunitat Valenciana se empieza a vislumbrar como un problema a medio plazo, que podría producir una crisis de energía.

A esto cabe sumar que el consumo de energía de la gigafactoría será muy elevado, con lo que será necesaria más potencia eléctrica que suministre a la futura planta. Esto se mitiga en parte con el proyecto parejo de las plantas fotovoltáicas, que si bien elevan exponencialmente el coste total del proyecto, resuelven en parte la futura demanda energética de la planta, con una energía barata y limpia.

Las renovables no sales gratis, y hay que replantear la estrategia

Pero tener una energía barata y limpia no sale gratis, y la Comunitat Valenciana que posee un sol interminable, ha empezado una carrera contra reloj puesta la mirada en esa desconexión de la central nuclear en 2030. Por ello, se quieren adelantar los proyectos de energías renovables. Pero por contra se ponen en peligro muchos parajes naturales, y se corre el peligro de implantar plantas de renovables en lugares sensibles.

Por otra parte la apuesta por transportes eléctricos hará necesaria una mayor inversión en medios y sobre todo, aumentar la capacidad de la red. Hoy insuficiente si se implementan los vehículos eléctricos en todas las poblaciones. Hemos empezado la casa por el tejado en la transición energética y esto se ha convertido en un problema político, y en una excusa para cada uno sacar rédito político, como todo lo que pasa en esta tierra de Berlanga.

Igual sería mucho más interesante que en todos los tejados de los edificios hubieran placas fotovoltáicas y pequeños molinos eólicos que implementar grandes plantas de generación de energía. La cabeza la tenemos para pensar y utilizar el sentido común, el menos común de los sentidos visto lo visto.