Lo de Pamplona

Enrique Arias Vega: Lo de Pamplona

Todo el mundo sabe, desde hace días, que “lo de Pamplona” es la entrega del ayuntamiento de esa ciudad a Bildu por los socialistas navarros. Un cambalache más de los que hacen continuamente los políticos no tendría más importancia si no se tratase de que el partido en el Gobierno —que prometió que nunca lo haría— ha pactado con los filoterroristas en la capital navarra.

Estamos ante un blanqueamiento total de quienes históricamente han jaleado a ETA y no han condenado sus crímenes. Ya el nuevo alcalde de EH Bildu se ha definido como hombre de convivencia desde que tiene uso de razón política. Este lavado de cara de la extrema izquierda más violenta tiene como objetivo allanar su camino a hacerse con las instituciones del Estado, es decir, a conseguir la independencia de Euskalerria, que engloba las tres provincias vascas, Navarra y otras tres provincias del País Vasco Francés.

No se trata de un logro a corto plazo, obviamente, ya que antes de nada pasa por el dominio abertzale de los tres territorios que configuran Euskadi. En esa política anda metido Arnaldo Otegi, que ha dado un paso a un lado, por su pasado terrorista, proponiendo como candidato a lehendakari a una persona de otra generación y con una biografía que no inspira ningún rechazo, como es Pello Otxandiano.

En este blanqueamiento de Bildu tiene una responsabilidad directa el PSOE, pues lo ha hecho socio de sus políticas, no sólo en la investidura, sino en el día a día parlamentario, hasta acabar votándole directamente para que se haga cargo de una alcaldía ajena a Euskadi, en una primera aproximación a la anexión de Navarra al País Vasco, con la implementación del euskera y la modificación de sus símbolos tradicionales.

La conclusión, triste conclusión, es que el PSOE no es de fiar, salvo para Bildu, convertido es socio preferente de sus tropelías.

A Contracorriente
Enrique Arias Vega