Siempre se ha dicho que querer es poder, y en política cuando uno tiene voluntad de solucionar los problemas éstos están más cerca de solucionarse.
Dicho y hecho, hoy los vecinos de Penyaroja se han reunido con el alcalde Joan Ribó para hablar de las dos recalificaciones por las que han llevado a los Tribunales al Ayuntamiento de Valencia. la Sentencia fue anulada por un defecto de forma, al no haber informado correctamente desd el Juzgado a la Generalitat Valenciana. Así, el juzgado ha dado un plazo a la Generalitat Valenciana, pero se presume que la sentencia volverá a ser la misma.
Con este horizonte y tras años de conflictos entre el vecindario de PenyaRoja y el Ayuntamiento de Ribó y Sandra Gómez, finalmente el alcalde les ha citado para dialogar sobre este polémico asunto.
Todo viene del pelotazo de Tabacalera, y para solventarlo se crea un nuevo pelotazo en PenyaRoja
La recalificación de los terrenos donde iba un jardín de 11.000 metros cuadrados y una dotación para el barrio, se recalificaban para incluir varias torres de viviendas. Estos terrenos se daban a la constructora Guadalmedina como compensación por no haber edificado en el terreno de Micer Mascó. Todo ello como origen en la sentencia Judicial donde la Plataforma salvem tabacalera denunció al antiguo consistorio municipal del partido Popular por el deribo de las naves traseras y laterales de tabacalera.
El Ayuntamiento finalmente en las naves laterales construyó sendos jardines y en los espacios traseros Guadalmedina podría construir unas torres de viviendas. Recalificando el terreno para poder ser edificable.
Tras la Sentencia que decía que la protección era del conjunto de las naves y no tan sólo de la central, en teoría se debería volver a la situación original y por tanto reconstruir las naves. pero en el terreno trtasero ya había construída una finca y la que estaba pendiente de construcción se paralizó.
Entonces, tal y somo relató el anterior concejal de Urbanismo, el socialista Vicent Sarriá, se estudiaron posibilidades para compensar a tal empresa y el coordinador de urbanismo, Rafael Rubio, hoy imputado por presuntas mordidas urbanísticas y el propio Consistorio decidieron llevar esa edificabilidad a terrenos del barrio de Penyaroja.
Dos solares de Penyaroja fueron elegidos por el Consistorio para compensar a Guadalmedina
Eligieron dos solares, uno junto a la nave de hormigónd e la Cross, a escasos ocho metros, donde iba proyectado un jardín de 11.000 metros cuadrados. Allí se elevantaría por contra una torre de viviendas.
El otro solar era tras el Rey Don Jaime, un solar triangular destinado a equipaciones públicas. Aquí se recalificó parte del mismo para albergar otra torre de viviendas.
Ahí empezaron los problemas con los vecinos que se negaban a que ambos solares que fueron cedidos al consistorio como carga urbanística de las viviendas cercanas ahora fueran recalificados y construídas más torres de viviendas en un barrio con una altísima presión demográfica. No querían renunciar a servicios que ahora no tienen. Tales como centro de salud, instalaciones deportivas o de servicios sociales.
Ribó y los vecinos más cerca de la solución a pesar de Sandra Gómez
Tras años de conflicto entre los vecinos y el Ayuntamiento, especialmente con la vicealcaldesa sandra Gómez que les ha tachado a los vecinos de «pijos» y hasta de «peperos», parece que la cordura ha entrado en el Ayuntamiento de Valencia.
El alcalde parece decidido a desatascar la situación a pesar de la negativa de su vicealcaldesa del PSPV que se niega a anegociar ni a hablar siquiera. Sigue denigrando al barrio y a los vecinos. Pero desde Compromís parece hay un cambio de actitud. Así, mientras asesores del PSPV siguen diciendo que aunque haya una nueva sentencia utilizarán todos los medios del Ayuntamiento para seguir recurriendo contra los vecinos, el alcalde parece que quiere solucionar el problema.
Así, ha asegurado hoy a los vecinos que la solución está más cerca y que no va a permitir un pelotazo para solventar otro. Se abre a negociar con los vecinos una solución e incluso asegura que las inversiones llegarán al barrio. Un barrio donde en más de 6 años no se ha visto ni un euro de inversión municipal. Ribó parece reconocer el desagravio con los vecinos y asegura que la situación se va a solventar de manera que todos se queden satisfechos.
La Cruela de la pesadilla de los vecinos
Así, la alcaldesa va a quedar en esta pesadilla con los vecinos como Cruela, la malvada persona que parece tener inquina personal a este barrio. Pero por suerte, Ribó parece que es más sensato y coherente y va a buscar una solución al problema. No es lógico que el Ayuntamiento batalle judicialmente contra sus propios vecinos y asociaciones. Algunos parece que el «Govern de els persones lo quieren convertir en el govern contra les persones».
Habrá que preguntar a Sandra Gómez por este empecinamiento y de paso qué explique cómo se eligió estos solares y por qué, porque muy transparente no parece fuera la decisión. Una decisión que nos deberíamos de cuestionar en vista de los acontecimientos que involucran a Rafael Rubio. Las malas lenguas podrían empezar a pensar en posibles comisiones y prevendas ya que el susodicho está incurso en un proceso legal por «supuestas» mordidas. Sólo por eso, por transparencia se debería de cuestionar todo lo que se hizo bajo el auspicio de este señor. Un empecinamiento total como el de la vicealcaldesa podría interpretarse que igual no es todo tan transparente como parece fue la decisión. Mejor aportar luz y taquígrafos para evitar sospechas de muchos. Siempre transparencia, siempre diálogo, nunca imposición y menos vejación.
