Giner denuncia el descontrol en la poda de árboles y que los alcorques se han convertido en focos de suciedad

– Las quejas relacionadas con el arbolado han subido más de un 46%

El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Valencia, Fernando Giner, presentará en la próxima comisión de Ecología Urbana tres mociones para exigir que se ponga fin al estado de abandono y descuido generalizado de la vegetación urbana de la ciudad. Así, por un lado, solicitará un mayor control y cuidado de los alcorques, “los cuales se encuentran cada vez más desaliñados, repletos de malas hierbas e incluso vacíos”, ha indicado al respecto.

  • “No es la primera vez que pedimos más atención sobre los alcorques».

En los últimos años, hemos notado que los espacios para colocar árboles en las calles de Valencia se encuentran muy descuidados, con matorrales y suciedad. Esto no solo supone un problema estético, sino también de higiene, puesto que pueden convertirse fácilmente en foco de insectos y roedores, en especial de cara al verano. Además, muchos de ellos están vacíos, como simples agujeros en el suelo”, ha lamentado. “Nosotros, por el contrario, entendemos que el fomento de la biodiversidad dentro de la ciudad debería ser compatible con mantener un control, limpieza y dignidad en nuestras calles”.

Así, el portavoz de la formación liberal ha indicado que todas las quejas que ahora trasladará al gobierno tienen realmente su origen en la denuncia vecinal. “Con esta actitud, no nos extraña en absoluto que las quejas relacionadas con el arbolado se hayan incrementado en un 46% en el último año”, ha explicado Giner. “Es por ello que nos vemos obligados a presentar dos mociones más, esta vez relacionadas con la poda de árboles. Y es que, tanto en Nou Moles como en la Avenida de la Plata hemos recibido quejas de que en algunos edificios las ramas se han descontrolado tanto que ya alcanzan las ventanas de los edificios”, ha indicado.

  • “No es la primera vez que tenemos que pedir explícitamente la poda y arreglo de los árboles en la vía pública».

Un trabajo que se supone que el gobierno tendría que hacer de manera automática y sin que se lo tuvieran que recordar todo el rato. Uno de los casos más graves fue en el Pla del Remei y Gran Vía, donde los árboles molestaban a los viandantes y dificultaban la visión de los vehículos. Otro fue en Germans Maristes, esta vez porque las ramas interferían con el carril bici”.

“Y a todo esto hay que añadir la fijación del gobierno por talar árboles y no dar ninguna justificación clara para ello. Así, también hemos tenido que presentar una pregunta a comisión para saber por qué se ha eliminado un ejemplar en Blasco Ibáñez”, ha indicado Giner.  “Consideramos que este descontrol generalizado sobre la vegetación no es más que otra muestra de la falta de capacidad de gestión de este gobierno y, sobre todo, una manifestación de absoluta hipocresía. Uno no puede abanderar la lucha ecologista y luego dar la espalda a las atenciones más básicas”, ha concluido Giner.