¿Qué pasó en l’Alqueria dels Moros?

Desde el Círculo para la Defensa y la Revitalización del Patrimonio Cultural pone el foco en el derrumbe que sucedió en uno de los edificios del conjunto de l’Alqueria dels Moros de Valencia.

Se hace esta pregunta en voz alta después de conocer que el Consistorio Municipal no va a investigar lo sucedido. A pesar de haberlo solicitado este colectivo yrecordado por el propio Sindic d’Agravis. la labor in vigilando no existió y la defensa del patrimonio es nula. Múltiples preguntas salen a la luz.

¿Qué pasó en l’Alqueria dels Moros?

El miércoles 8 de agosto de 2018 se vino abajo la construcción nº2 (de titularidad privada y cuya fachada principal recae al Carrer Emili Camps i Gallego) del conjunto rural conocido como l’alqueria dels Moros (BIC). Un edificio abandonado y denunciado desde hacía décadas y cuyo expediente de denuncia contaba ya con cuatro recomendaciones del Síndic d’Agravis, desde el año 2012, amén de otras denuncias y requerimientos efectuados por otras entidades, desde hacía lustros.

l’Alqueria dels Moros «Empieza las obras en el edificio contiguo por parte del Ayuntamiento y «se cae» el edificio»

Cabe señalar que, casualmente, la construcción nº2 se derrumbó a los pocos días de empezar las obras en la edificación situada justo enfrente (la Casa del Senyor), que forma parte también del mismo conjunto BIC y cuyo titular es el Ayuntamiento de Valencia

Tras este derrumbe, hemos intentado averiguar, por activa y por pasiva, si el Ayuntamiento de Valencia había puesto o no estos hechos en manos de un juez o presentado la correspondiente denuncia por la vía penal contra los responsables, por acción u omisión, negligencia grave o imprudencia, de la destrucción de un edificio que forma parte de un conjunto rural catalogado y protegido como Bien de Interés Cultural.

Nuestra asociación considera que lo que ocurrió ese miércoles 8 de agosto de 2018 podría ser constitutivo de un presunto delito sobre el patrimonio histórico, tal como así consta en el vigente Código Penal, siendo de aplicación lo establecido en el Artículo 323 y en el Artículo 324.

Escrito de noviembre de 2019 al Ayuntamiento de Valencia

Por este motivo, en noviembre de 2019, trasladamos por RGE al Ayuntamiento de Valencia tres sencillas cuestiones:

  1. Que el Ayuntamiento de Valencia nos confirme si, en cumplimiento del  Artículo 259 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, ha puesto o no en conocimiento del Juez o funcionario fiscal la comisión de este presunto delito contra el patrimonio cultural, tipificado en los artículos 323 y 324 del Código Penal.
  2. El Ayuntamiento de Valencia nos confirme si, en cumplimiento de lo establecido en el Artículo 408 del Código Penal, ha promovido o no la persecución de este presunto delito contra el patrimonio cultural, tipificado en los artículos 323 y 324 del Código Penal.
  3. El Ayuntamiento de Valencia nos confirme si, ha presentado o no la correspondiente denuncia por la vía penal contra los responsables de un presunto delito contra el patrimonio cultural, por acción u omisión, negligencia grave o imprudencia, tal y como aparece tipificado en los artículos 323 y 324 del Código Penal.

Tras meses de espera, con la aplicación del correspondiente silencio administrativo y después de tener que solicitar la intervención del Síndic de Greuges, recibimos una serie de respuestas de las que podemos extraer varias conclusiones.

Que el edificio, después de aguantar dos décadas de abandono, se «cayó» casualmente, apenas tres días después de empezar las obras justo en frente, en un edificio separado por la misma calle y a escasos metros.

A fecha de hoy no se han depurado responsabilidades ni se han aclarado las causas objetivas y reales del derrumbe de una casa que forma parte de un BIC ¿Qué pasó exactamente allí ese 8 de agosto de 2018?

Que al Ayuntamiento de Valencia no le consta que desde el Servicio de Disciplina Urbanística, adscrito a Delegación de Dña. Sandra Gómez López…

Hayan realizado, o se vayan a realizar, actuaciones de carácter penal contra la propiedad de la Alquería dels Moros 2 A por un presunto delito contra el patrimonio cultural. Ergo, se ha dejado de perseguir un presunto delito penal contra el patrimonio histórico y cultural y no hay intención de perseguirlo ¿Cuál es el motivo real para no perseguir este presunto delito contra nuestro patrimonio cultural?

Que por lo visto, no había nadie presente en el momento en que sucedieron los hechos, a pesar de que el Ayuntamiento estaba ya rehabilitando la alquería que hay justo enfrente, desviando la atención y responsabilidad al promotor del expediente de queja, que se encontraba en la otra punta de la ciudad en el momento del desplome. Nadie vio nada, nadie sabía nada, nadie denunció nada ¿Cómo es posible que no hubiera ningún testigo ese día?

Que no consta la inscripción registral del inmueble ni, por tanto, sus posibles titulares. No se puede localizar registralmente dicho inmueble por dirección, por referencia catastral, ni por posible titular.

Esa casa no es de nadie. (A pesar de que a través de las cuatro recomendaciones del Síndic el Ayuntamiento requería a los supuestos propietarios). Pero tras el derrumbe se afirmaba lo siguiente:

  • «El consistorio ha lamentado que los tiempos se hayan dilatado en este caso. «Debido a diferentes recursos de reposición, comunicaciones de inicio de obras incumplidas por parte de los propietarios e, incluso, alguna maniobra para intentar evadir responsabilidades».
  • «Una de las propiedades más afectadas por el derrumbamiento presentó un certificado de seguridad firmado por un arquitecto.
  • Aseguraba que las condiciones de seguridad del edificio eran correctas» y ha afirmado que este documento no se aceptó».

El Ayuntamiento de Valencia debería aclarar pues a quién se dirigió, quién respondió y puso recursos de reposición, quién comunicó el inicio de unas obra inexistentes, quién presentó un certificado de seguridad firmado por un arquitecto, que fue además rechazado por el consistorio, etc. si no consta la inscripción registral del inmueble ni, por tanto, sus posibles titulares.

Mientras tanto, siguen siendo muchas las dudas, interrogantes y misterios que envuelven el derrumbe de una de las construcciones que forman parte de un conjunto con la máxima protección patrimonial. Faltan muchas explicaciones y aclaraciones y los responsables del Ayuntamiento de Valencia deberían dar la cara, en lugar de esconderse y ponerse de perfil, incluso en RRSS. Este silencio no ayuda a despejar las incógnitas y aumenta las sospechas de que hay algo turbio detrás de este asunto.

César Guardeño Gil
Presidente Círculo por la Defensa y Difusión del Patrimonio Cultural

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