Prosigue la tala indiscriminada de arbolado en José María de Haro para construir el carril bici. Ya van más de 30 árboles abatidos

El Ayuntamiento de Valencia sigue con su tala de arbolado en José María de Haro para la «sostenibilidad». La razón es la construcción de un nuevo carril bici en la calle que conecte Blasco Ibañez con la Avenida del Puerto a través del tramo de José maría de Haro y de José Aguilar.

Hace semanas que se iniciaron las obras y la primera consecuencia fue la tala de cerca de 20 ejemplares de arbolado tipo tilo en José María de Haro, entre Blasco Ibañez y Pedro de Valencia.

Tala indiscriminada y ya se cuentan casi por 40 árboles «sanos» talados

Esta semana han proseguido la tala indiscriminada y han talado más de una decena de naranjos en el tramo entre Pedro de Valencia y Justo y Pastor.

En Pro de la sostenibilidad sucederá como sucedió en la construcción del carril bici de la zona próxima a la estación del Cabanyal, en el tramo entre Luis Peixó y Marino Blas de Lezo. En este punto se arrasaron los microjardines con centenares de arbustos y plantas y cerca de 40 árboles.

La promesa de Grezzi a la Asociación Vecinal de Beteró ante sus quejas fue la plantación posterior de esos ejemplares. Aún siguen esperando esa plantación.

Esta zona de Algirós por «carriles bici» ha perdido más de 200 ejemplares de árboles y más de 500 plantas. Unidas a la tala de más de 1.000 plantas que se hizo hace años en la separación del carril bici de la Av. Blasco Ibañez en la zona dan lugar a mayor polución y menos plantas.

La «sostenibilidad del Ayuntamiento»

Otro de los ejemplos de esa sostenibilidad fue el carril bici de la calle Ramiro de Maeztu. Primero Grezzi hizo un carril bici separado más de tres metros de la acera, segregado del tráfico. Lugo sandra Gómez tuvo que reparar el «desaguisado».

Se gastaron más de 160.000€ en un tramo de la calle y sólo en la acera norte, colocando 22 maceteros de grandes dimensiones sobre la nueva acera. Plantaron arbolado y plantas e instalaron riego por goteo.

Pero la realidad es que las plantas y el arbolado murieron en su mayoría por falta de riego. Parece que a alguien se le olvidó conectar toda la infraestructura de riego a la toma de agua.