80 fallecidos desde inicio de año y 107.000 contagiados en la Comunitat Valenciana y las autoridades siguen en su apatía

La Comunitat Valenciana tras actualizar los datos de ayer sitúa su incidencia acumulada de casos COVID en 2112,54 casos por cada 100.000 habitantes.

Los datos muestran un fuerte agravamiento desde las campanadas

Los datos han empeoarado rápidamente estas Navidades, especialmente desde las campanadas de inicio del año. Así, desde que nos comimos las uvas hace una semana se han reportado 80 fallecimientos por COVID en la Comunitat Valenciana. Una cifra escalofriante que recuerda a los peores momentos de la pandemia vividos hace ahora justo un año.

Si comparamos las cifras ya por sí elevadas de los últimos datos del año dados el 30 de diciembre con los reportados ayer vemos la magnitud de esta sexta oleada marcada claramente por la variante Ómicron que ha cogido nuevamente totalmente desprevenidas a las autoridades sanitarias.

  • 47.727 personas más con el virus activo desde inicios de año. La cifra de ayer fieron 106.980 personas con COVID actualmente en la Comunitat Valenciana.
  • 217 hospitalizados más en los 8 días del año. Ya son 1.184 personas.
  • 4 personas más en UCI. Llegamos ayer a las 190 personas.
  • 80 fallecimientos por COVID.

Nuevo protocolo escolar

Con todos estos datos se ha decidido que el lunes los niños vuelvan al colegio. Así, todas las franjas de edad volverán a las clases presenciales. Primaria, Secundaria y eseñanzas universitarias volverán a dar clases presenciales.

Ayer el Consejo Interterritorial decidió con respecto a esto que en el caso de una clase tener al menos 4 positivos por COVID ésta se confianrá totalmente durante 7 días. En caso de ser menos sólo se confinará al alumno contagiado.

Cambio de actitud de las autoridades

Desde el Palau de la Generalitat Valenciana ha habido una clara diferencia, la actitud y la respuesta en esta sexta oleada. Llama poderosamente la atención la vicepresidenta Oltra que ha pasado de exigir más contundencia con las medidas a tomar a pasar a decir que «esto es ya bastente más leve». Incluso se permitió en el último pleno del Consell del año, en la rueda de prensa segurar que había menos hospitalizados. Ese mismo día las cifras de hospitalizados aumentaron. «Por suerte la sintomatología es menor y ya no están intubados en UCI». arece que ha pasado de exigir medidas a restar importancia a la pandemia.

Un cambio de actitud en las medidas a tomar, en este caso, ninguna. Sólo los presidentes autonómicos decidieron junto con Pedro Sánchez volver a implantar la obligatoriedad de la mascarilla en la calle. Se ha pasado de una restricción total a una libertad total, de un extremo a otro. No comprensible para nadie este cambio radical.

Las autoridades parecen haber tirado al toalla

De nuevo se ha colapsado la atención primaria, así la decisión surrealista y salomónica ha sido que no se hagan rastreos y validar las prubas de antígenos autotest para evitar hacer pruebas. Da la sensación de que no hemos aprendido absolutamente nada y volvemos al deyavú contínuo en bucle cada nueva ola. La improvisación absoluta y los parches uno tras otro.

La estrategia no existe y sólo se fía todo a la vacunación. Los expertos ya llevan semanas advirtiendo del error de confiar todo en la vacunación. De nuevo, han sido ignorados. Poco o nada hemos aprendido. En vez de salir más fuertes parece que hayamos salido más tontos.

Eso sí con una población hastiada, con graves problemas mentales debidos a la situación vivida. Con un hartazgo que ha llevado a miles de personas a negar incluso la evidencia científica. En Pleno siglo XXI parece hayamos retrocedido un par de siglos.

Eso sí, la pandemia nos ha hecho ser por desgracia para muchas familias 8197 valencianos menos que han perecido por esta pandemia en nuestra Comunitat Valenciana, que no se nos olvide.