Opinión especial «El catalanismo en el Ayuntamiento de Valencia». Vox

Opinión especial «El catalanismo en el Ayuntamiento de Valencia». Vox

Ribó y Compromís se han quitado la careta

Compromís ya va a pecho descubierto después de que se la haya caído al careta. Eso de Mónica Oltra de que “Hablamos de los países en privado porque si no no nos votaría nadie”, esa entrevista a la TV3, muestra perfectamente a un lobo con piel de cordero.

En nuestro Ayuntamiento se dan miles de euros de dinero público a entidades catalanistas que lo gastan en fomentar la independencia y construir su falsedad histórica, cultural y lingüística, con la que construir un relato para sustentar su entelequia de sus países imaginarios.

Ribó y ahora también su delfín, el vicealcalde Campillo, cada vez que sale a la palestra esta situación hablan de que resucitamos a fantasmas, pero cada principio de año, el “negoci” catalanista vuelve a las calles. Sus magas llegan al Ayuntamiento que las recibe con las puertas abiertas y les ofrece el balcón como altavoz. Un acto que no nos sale de gratis, de una entidad presidida por un miembro del Ayuntamiento, con carnet de parido de Compromís.

Victimismo y un mensaje, pero con acciones contrarias a las que dicen defender

Cada año, los fantasmas del pasado vuelven, hablan de infancia, pero su desfile está plagado de banderas republicanas, cantos a sus países y ideología independentista. Donde lejos de ofrecer calidez y valores como el respeto, utiliza el victimismo como bandera y advierte de la “bestia” valenciana, tratando a los que queremos recoger los ideales democráticos y respetar a las leyes como el mismo diablo.

El Estatuto de Autonomía, la Constitución Española y el ordenamiento jurídico que han jurado o prometido por imperativo legal al ocupar sus cargos, defender y proteger, es vulnerado continuamente por ellos mismos.

Cualquier acto o evento es bueno para aplicar una ideología con la que atropellar a los demás, “el tomate de la infamia” de la ONG del catalán plataforma per la llengua, hinchó el tomate en una feria alimentaria, para recoger firmas por el fomento de la lengua…”Para presionar a los gobiernos de Cataluña, Valencia y Baleares a trabajar por nuestra lengua”. Supongo que será por el español, porque desde luego en cada territorio esgrimido hay una lengua autóctona.

Aquí lo que hay es un genocidio lingüístico que trata de imponer una lengua y cultura ajena sobre la autóctona, incluso atropellando al español.

Discriminación que practica Compromís

Se discrimina a los españoles y a los valencianoparlantes por introducir un estándar inventado para así aborregar y unir territorios para sus ideales imperialistas.

Este concejal, no va a permitir más vulneraciones de derechos ni del propio ordenamiento jurídico, y no cesará en su labor de denunciar y presentar mociones para acabar con este gran negocio de unos pocos que quieren imponer su ideología y criterio sobre los demás, con la ayuda de grandes dosis de dinero público de las instituciones públicas que les subvencionan desde Madrid, Cataluña y Valencia. Persiguiendo unos claros objetivos, que no son sino un claro ejemplo de unos intereses muy concretos.

Pero los malos somos los que defendemos la ley y las Instituciones, el mundo al revés, pero ya sabemos qué podemos esperar de un alcalde que cada día mueve sus líneas rojas en política, del que no cesa nunca a nadie, a pesar  e sus tropelías.

Un alcalde adalid de la democracia y la transparencia, que aplica el rodillo de la opacidad como nadie. Cuyo ejemplo de democracia es “yo soy el alcalde, yo tengo la vara de mando y decido”. Imponiendo sus ideales, a pesar de protestas y voces discordantes.

Los votos no son un cheque en blanco para cuatro años para hacer y deshacer a su antojo el alcalde. Eso ya pasó a la historia, y esperamos que Compromís, dentro de poco sea historia, por el bien de los valencianos.

Vicente Montañez Valenzuela

Concejal de Vox del Ayuntamiento de Valencia. Portavoz adjunto del Grupo Vox