Sandra Gómez evita proteger las Naves de la Calle Guala y traslada la edificabilidad a otro punto sin contar con los vecinos

Sandra Gómez volvió a ejecutar su guerra particular con sus socios de gobierno/ enemigos irreconciliables ayer. De apso evitó hablar con los vecinos de Zaidía, los mismos a los que en Plenos pasados aseguró que las naves de la Zaidía acabarían en el suelo.

Programó una rueda de prensa a la misma hora que los vecinos habían citado a la prensa, unos en el exterior del edificio consistorial y ella, separada por un muro en la sala de prensa de la segunda planta. Nuevamente evitó coincidir con ellos. A pesar de haber utilizado en su twitter las fotos con los vecinos de su única visita el año pasado al barrio.

Ayer mientras Pere Fuset era más cauto y evitaba dar pistas sobre la idea que llevan, la vice-alcaldesa volvió vía twitter a mostrar sus intenciones. De paso, evitó hablar con los vecinos con los que la relación es tensa.

La solución unilateral de Sandra Gómez

La solución plantea el derribo de las Naves, obviando los informes de organismos nacionales e internacionales

De nuevo Sandra Gómez unilaterlamente como concejal de urbanismo ignora los informes de organismos nacionales e internacionales y nacionales que sí plantean una conservación patrimonial de las naves.

«Hemos planteado una solución que, en el marco de la revisión del planeamiento de La Saïdia, nos permite regenerar distintos vacíos urbanos con nuevas viviendas, dotaciones y espacios libres. Además hemos incluido una solución para el ámbito de la calle Guala.»

«El planeamiento actual implicaría un importante coste en expropiaciones. Planteando una unidad de ejecución conseguimos desbloquear la situación de estos vacíos urbanos, obteniendo a la vez y de forma gratuita suelo y zonas verdes.»

Así traslada parte de la edificabilidad perdida en el proyecto de las Naves de la calle Guala a Doctor Olóriz. Trasladando el problema a otra parte de la zona de Zaidía.

Así Sandra Gómez ha explicado que su intención es permitir construir viviendas en los edificios derruidos de la calle San Bruno y en parte del patio de manzanas contiguo.

Un anuncio hecho de espaladas a los vecinos una vez más y sin contar con su opinión, nuevamente diseñar una ciudad de espaldas a los vecinos, como nos tiene últimamente acostumbrados la vicealcaldesa.

«Gobernar para los vecinos, pero sin contar con ellos»