La Fiscalia pide responsabilidades por el clorado de acequias de verano de 2019 y lo envía al Juzgado

Hace unos días conocimos que la Fiscalía de Medio Ambiente había denunciado a la EPSAR ( Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales). Esta denuncia era como consecuencia de la cloración de acequias que vertían al mar entre julio y agosto de 2019.

Verano de 2019 con playas llenas de «aguas fecales»

En 2019 las playas valencianas fueron cerradas en varias ocasiones por la presencia de bacterias Écoli. Son bacterias presentes en aguas fecales. Estas bacterias pueden provocar problemas estomacales y su presencia cerró las playas valencianas en plena campaña estival.

La Consellería de Agricultura ante estos problemas puso distintas plantas de clorado de agua en las salidas de acequias hacia el mar. Muchos colectivos denunciaron entonces que esta solución tendría problemas medioambientales. Tras la aparición de muchos peces muertos en los alrededores de algunas de estas plantas la polémica se puso en manos de la Fiscalía.

Además, la EPSAR limpió las acequias más próximas al mar con igual sistema, la cloración. Ahora la Fiscalía sostiene que estas actuaciones provocaron un daño al medio ambiente.

La Fiscalía lleva el tema al Juzgado y exige a Mirella Mollá  que identifique a los miembros de la comisión que decidieron la cloración

La Fiscalía lleva la denuncia al Juzgado de Mssamagrell que ahora deberá investigar los hechos.

Igualmente la Fiscalía solicita a la Consellería de Agricultura de Mirella Mollá que identifique a los miembros de la comisión técnica que procedía als eguimiento de la calidad de las aguas de baño y decidió adoptar esa decisión de clorado.

Ciudadanos pide la comparecencia de Mirella Mollá

El portavoz del área de Medio Ambiente de Ciudadanos en Les Corts valencianas, Eduardo del Pozo, ha exigido la comparecencia de la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mirella Mollà. Para dar cuenta de la “mala decisión” de echar cloro al mar Mediterráneo en el verano de 2019 para desinfectar unos vertidos de aguas fecales que obligaron a cerrar varias playas en Valencia.