La localidad de San Rafael del Río puso ayer el broche de oro a las fiestas patronales tras una exitosa y participativa semana en honor al patrón, San Rafael.
El alcalde del municipio, Domingo Giner, ha puesto de manifiesto que «pese a algún capítulo de lluvia, las ganas de fiesta han hecho que sean unas jornadas inolvidables y que la participación haya sido la nota predominante en todos los actos».
Asimismo, el alcalde ha resaltado la falta de incidentes y ha agradecido a «todos los que colaboran y ayudan a organizar estas fiestas de manera altruista» que hacen que «cada año estas fiestas sean especiales y una forma de consolidar y guardar nuestras tradiciones».
«Las fiestas son un patrimonio inmaterial de San Rafael y son un legado que nosotros abrazamos de nuestros antepasados para transmitirlos y entregarlos a las generaciones futuras del pueblo».
El alcalde ha puesto de manifiesto que «las fiestas son un patrimonio inmaterial de San Rafael y son un legado que nosotros abrazamos de nuestros antepasados para transmitirlos y entregarlos a las generaciones futuras del pueblo».
Tal y como explica el alcalde, Domingo Giner, se trata de «una festividad muy importante por su carácter emotivo y porque representan nuestra esencia como municipio».
El pasado jueves 24 de octubre se celebró por todo lo alto la fiesta del patrón, San Rafael, con una concentración por la mañana y a las 12.00 del mediodía se celebró una misa y una procesión con el patrón y para terminar el día, la final del Campeonat de Bitlles Local.
El viernes 25, por su parte, se celebró una chocolatada popular en el patio de los jubilados a las 18.00 de la tarde. El sábado hubo un concurso de cocina con la mejor tortilla como excusa para pasarlo bien y por la noche una torrada popular en la carpa del polideportivo. La gastronomía y la hermandad han sido las notas que han marcado las fiestas.