El Ayuntamiento de València ha decretado 3 días de luto oficial y ha bajado las banderas a media asta en señal de duelo por el fallecimiento del Papa Francisco a los 88 años de edad. La alcaldesa, María José Catalá, ha destacado la gran huella que ha dejado el Santo Padre durante su Pontificado: “Fue un faro de esperanza y fe para millones de personas. Un referente de humildad, cercanía y amor al prójimo”.
Fue una “persona comprometida con las personas más necesitadas y preocupado por las inquietudes que nos preocupan a todos como el futuro de nuestros jóvenes, la lucha contra el cambio climático y las guerras. Fue un Papa muy humano y cercano que unía a todas las sensibilidades”. La alcaldesa ha recordado una de sus frases para despedirlo: “La esperanza sorprende y abre horizontes, nos hace soñar lo inimaginable y lo realiza.”
Encuentro de la alcaldesa con el Papa Francisco
La alcaldesa fue recibida en mayo del año pasado por el Papa Francisco con motivo de su participación en la cumbre From Climate Crisis to Climate Resilience promovida por el Papa Francisco en la Ciudad del Vaticano y que reunió a alcaldes, gobernadores, científicos e investigadores de todo el mundo.
La alcaldesa le hizo entrega al pontífice en nombre de Valencia del certificado de adopción de un naranjo Navel, plantado para Su Santidad Papa Francisco y bautizado con el nombre Laudate Deum, en referencia a la Exhortación Apostólica del Papa sobre la crisis climática el pasado 4 de octubre de 2023.
La cosecha ecológica se entrega, de forma directa, siguiendo el modelo de crowdfarming durante tres años y las naranjas son enviadas al Vaticano. Además, la alcaldesa le entregó una pileta de agua bendita con la imagen de la Virgen de los Desamparados, San Vicente Ferrer y San Vicente Mártir.