El Síndic d’Agravis obliga a JCF a llevar a Pleno la participación de la Reina de l’Horta en la Ofrena a la Virgen

Años llevan desde la Associacio Cultural de l’Horta solicitando por registrod e entrada el poder participar en la Ofrena a la Mare de Deu dels Desamparats que celebra JCF en Fallas. Aseguran que si las casas regionales y otras organizaciones tienen derecho a participar, ellos creen que también podrían junto a las mismas.

Años en los que o bien la propia entidad festiva no les ha contestado o bien les ha indicado que no es posible sin dar mayor explicación. Remitiéndoles a nuevos intentos el año siguiente, intentando que esta asociación se canse de tal petición y desista. Compromís se ha negado en la figura de Carlos Enrique Galiana que esta entidad participe en los actos municipales o de JCF a pesar de su gran labor en pro de la Cultura Valenciana.

El pecado de la A.C. l’Horta es ser valencianista

El pecado mortal que comete esta asociación a ojos de Compromís es ser valencianista. Así, permiten la participación con un estandarte con una catribarrada en la Procesión Cívica del 9 d’Octubre de la catalanista El Micalet, que niega la cultura valenciana, pero impide la participación de la A.C. l’Horta en la misma.

Gobernar con ideología y primando a los amiguetes a los que de paso se les llena el bolsillo es la forma de gobierno de los últimos años de Compromís en Valencia. Así, la entidad catalanista del Micalet, donde por cierto al propia mujer del alcalde participa activamente está presidida por Antonio Pardiñas, dirigente de Compromís y que se presentó en su pueblo como candidato a la alcaldía por el partido catalanista.

«Un yo me lo guiso y yo me lo como que hace Compromís pero con dinero  y recursos públicos».

JCF ha negado que la Asmablea de Presidentes soberana pudiera opinar, debatir y decidir

Según los propios Estatutos de JCF en la Asamblea de Presidentes la que tiene potestad decisoria, pero Galiana y Compromís han negado tal potestad a la asamblea de presidentes los últimos ejercicios.

Cabe recordar además que JCF es un organismo autónomo pero «dependiente del Ayuntamiento de Valencia» y que recibe casi todos sus ingresos del Consistorio Municipal, aunque fuera de la fiscalización de intervención municipal. Así, desde un organismo parte del Ayuntamiento (ya que el Ayuntamiento impone como presidente al concejal de turno nombrado por el alcalde) se ha negado la participación y se ha vulnerado la ley de procedimiento administrativo al no dar respuesta razonada ni permitir alegaciones.

Ahora será Fuset, que ha permanecido callado estos años, el que deberá dar traslado a la Asamblea de Presidentes de esta petición si no quiere reabrir la queja en el Síndic y seguir ampliando las irregularidades en el organismo fallero.