– Se ha ido dando respuesta a las diferentes fases, desde la intervención en crisis hasta la configuración de las unidades especializadas en el trauma psicológico
– Por el momento, las unidades de Salud Mental mantienen en seguimiento a más de mil personas de las zonas afectadas
Un total de 120 profesionales en salud mental están prestando asistencia psicológica a las personas afectadas por las inundaciones del pasado 29 de octubre, desde los servicios implantados específicamente por la Conselleria de Sanidad.
En la primera semana tras la riada, la Conselleria de Sanidad, a través de la Oficina Autonómica de Salud Mental, empezó a activar progresivamente y en función de la accesibilidad que se iba teniendo, los 17 puntos extraordinarios instalados en diferentes municipios de las zonas afectadas de l’Horta Sud y de La Ribera.
En estos locales se ha estado ofreciendo una atención integral y especializada, además de continua, al mantener la asistencia los fines de semana en un punto concreto de los municipios de Albal, Alfafar, Benetússer, Chiva, Massanassa, Paiporta, Picanya, Sedaví y Torrent, y en el caso de Aldaia y Catarroja contaban con dos puntos en cada municipio.
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Aunque el departamento de salud de La Ribera mantuvo abiertas todas sus unidades de salud mental, se activaron puntos extraordinarios en Guadassuar, L’Alcúdia, Algemesí y Sueca para evitar el desplazamiento de los pacientes.
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Por su parte, las unidades de salud mental del departamento de Requena estuvieron prestando asistencia desde el inicio a las poblaciones afectadas de esa zona.
Además, de esos puntos de atención en los municipios, se puso en marcha la Unidad de Atención Psicológica, en el Centro de Eventos de Feria Valencia, desde la que 30 profesionales dieron asistencia, tanto presencial como remota, mediante llamadas telefónicas y videoconferencias.
Por otra parte, durante toda la primera fase de la emergencia, las Oficinas de Asistencia a las Víctimas del Delito movilizaron 40 efectivos: psicólogos, trabajadores sociales y letrados para la atención y acompañamiento a familiares de fallecidos y desparecidos, prestando asistencia a más de 180 familias, tanto en el momento de presentar la denuncia y la recogida de datos, hasta la posterior derivación a servicios específicos según el caso, como los servicios puestos a disposición por Salud Mental.
Posteriormente, tras la posible recuperación de la actividad en la mayoría de las consultas de las unidades de salud mental de las zonas afectadas, se está atendiendo desde las mismas. No obstante, se mantiene un punto extraordinario de atención en Paiporta y, en el caso de la unidad de salud mental de Catarroja, la consulta se está prestando en un centro habilitado ‘ex profeso’ en Albal.
Las medidas incluidas en la primera fase han sido complementadas con la puesta en marcha de cuatro unidades de Atención al Trauma Psicológico, destinadas a proporcionar atención integral a las personas afectadas. Estas unidades están en funcionamiento, en horario de tardes, en los departamentos de salud de La Fe, Hospital General de València, Doctor Peset y La Ribera. En cuanto a los departamentos de salud de Manises y Requena, se está en disposición de incorporar sendas unidades de trauma si las circunstancias lo requieren.
Plan estratégico
Estas unidades fueron diseñadas nada más producirse la emergencia como parte de un plan estratégico para garantizar la continuidad asistencial más allá de los primeros días, puesto que la afectación en salud derivada de esta situación puede extenderse a meses y a años posteriores.
De esta manera, desde la Conselleria de Sanidad se ha ido dando respuesta a las diferentes fases; desde la intervención en crisis, hasta la configuración de unidades especializadas en el trauma psicológico.
Estas unidades se encargan de dar seguimiento a los pacientes atendidos inicialmente por los 17 equipos de salud mental que fueron desplegados en municipios de L’Horta y La Ribera, así como a las personas que recibieron atención en el centro temporal de Feria València. También asumen la atención de nuevos casos identificados por los equipos de Atención Primaria y de Salud Mental en los municipios afectados, además de los familiares de personas fallecidas o desaparecidas, derivados desde la Oficina de Víctimas de la Conselleria de Justicia.
Cabe recordar que los pacientes que previamente a la riada ya recibían atención en las distintas unidades de salud mental, y especialmente aquellos con patologías más graves, han continuado recibiendo seguimiento telefónico desde los servicios correspondientes.
Se espera que estas unidades permanezcan activas durante los próximos años, dado que el impacto emocional de la catástrofe puede manifestarse en meses posteriores. Hasta ahora, más de mil personas han sido atendidas en ellas por reacciones de estrés de diversa índole. Según los expertos, el impacto emocional de catástrofes como la riada no se limita a las primeras semanas tras la emergencia. Como recogen estudios internacionales, hasta un 25 % de la población expuesta podría desarrollar trastornos relacionados con el estrés meses después de la catástrofe.
Atención integral y especializada
Cada unidad está compuesta por un equipo multidisciplinar que incluye psiquiatras, psicólogos clínicos para adultos, niños y adolescentes, así como profesionales de enfermería de salud mental y de trabajo social. Más de 120 profesionales de la salud mental participan en los distintos dispositivos de salud mental constituidos para afrontar los efectos de la DANA. Este enfoque integral busca abordar tanto las necesidades inmediatas como las consecuencias emocionales a largo plazo.
En las unidades de trauma se tendrá en cuenta “las prioridades absolutas de salud mental” como son el trastorno mental grave y la prevención del estrés postraumático.
Con el objetivo de optimizar los recursos y la detección temprana, los médicos de Familia y pediatras de Atención Primaria disponen de cuestionarios de cribado, que permiten identificar de manera precisa a quienes necesitan atención especializada, evitando derivaciones innecesarias y asegurando una cobertura eficiente.
Refuerzo en los centros educativos más afectados
Como parte de la respuesta integral, la Conselleria de Sanidad ha destinado 20 psicólogos de reciente incorporación a los centros educativos más afectados. Estos profesionales, adscritos a los equipos de Salud Mental de la Infancia y Adolescencia, trabajarán en coordinación con los equipos socioeducativos de la Conselleria de Educación para la detección precoz de posibles trastornos emocionales entre niños y adolescentes, así como en la prevención de futuras complicaciones.
Se realizarán cribajes regulares a través de cuestionarios específicos de estrés, o las unidades de prevención de las adicciones, así como formación especializada y continua a los profesionales.
El refuerzo que se ha llevado a cabo ha sido posible gracias a que el Consell ha realizado el mayor incremento en personal para la atención a la salud mental en la Comunitat Valenciana con la creación el pasado mes de octubre de 200 nuevas plazas previstas en el Plan de Salud Mental 2024-2027, lo que ha permitido evitar el colapso del sistema y garantizar una atención de calidad a las personas afectadas.
En concreto en la provincia de Valencia esto ha supuesto un incremento de plantilla de 19 psiquiatras y 55 psicólogos, lo que permitirá mantener la asistencia en el resto de la provincia, al tiempo que se presta servicio específico a las personas damnificadas por la riada.