Ayer concluyó otra de las reuniones maratonianas entre el Sindicato Médico CESM CV y el propio Conseller de Sanitat Miguel Mínguez y su gabinete. Otra vez sin acuerdo.
Fuentes del Sindicato Médico aseguran que aún están muy lejos de llegar a un acuerdo. Además añaden que han rebajado todas sus expectativas monetarias y ahora se centran en la sanidad pública y su organización para no perjudicar a los pacientes. Pero las líneas rojas siguen traspasadas por Sanitat.

Una y otra vez aseguran que si bien con el Conseller todo son buenas palabras e intenciones, éstas nos e reflejan en los borradores de acuerdos que luego les remiten. Así, después de realizar un esfuerzo casi titánico, y de transigir en eliminar la mayoría de mejoras retributivas el acuerdo aún está lejos de llegar.
En breve comenzarán los paros y las concentraciones y ya hay una fecha, la del 6 de marzo como primera fecha de huelga, está a menos de 25 días y sigue sin haber un borrador sobre la mesa con el que negociar.
La Ribera al borde de la Huelga

El Departamento de Salud de la Ribera en una asamblea convocó a sus trabajadores saliendo que darían un plazo de un mes a Sanitat para negociar, si no acudirían a la huelga. Quedan menos de 15 días y Sanitat según los representantes legítimos de los trabajadores está también aquí muy lejos de llegar a un acuerdo.
El Comité de Empresa asegura que se han reunido una sola vez con Sanitat y salieron sin ningún acuerdo. Ahora esperan una nueva llamada, pero el tiempo sigue corriendo.
En este Departamento revertido los problemas se acumulan y la calidad asistencial ha caído en picado. Cada día hay decenas de pacientes esperando en camas en los pasillos su ingreso en el Hospital y su habitación, y los trabajadores hablan de falta de medios y de personal.
«Si bien el personal desde la pandemia ha aumentado levemente, las necesidades se han multiplicado, con lo que no podemos hacer frente a las necesidades ni con los medios ni con el personal actual».
Puig tiene un problema

El President, el supuesto X. Puig tiene un problema más, y es que en menos de 15 días si nadie lo remedia todo un Departamento de Salud se le pondrá en huelga, y no es cualquiera, es el de La Ribera. La llama del hartazgo puede calar y ya hay otros departamentos como Torrevieja que están a punto para seguir el mismo camino.
Con los médicos no se avanza y con los de la Ribera tampoco, pero Puig sigue sin presentarse en una reunión y sigue hablando de la mejor sanidad posible, convocando un acto el domingo en Valencia en el que se vanagloriará de una Sanidad inexistente, un cuento de hadas de campaña electoral para no asumir los recortes sanitarios y especialmente el desmembramiento de la Sanidad Pública Valenciana por su gobierno y el de Compromís.

El saber si es el X. Puig de los papeles del caso AZUD puede ser el menor de sus problemas para un President negacionista de la realidad y absolutamente desafecto de sus propios votantes. la mayoría de valencianos para su desgracia cuentan ya los días para que abandone el Palau de la Generalitat Valenciana, por el bien de nuestra salud y para que nadie juegue con la salud y la vida de las personas.

Desde SAMUS sin médicos a hospitales voladores…
Esta legislatura lo hemos podido ver todo. Lo imaginable y lo inimaginable. Ambulancias SAMU que contravienen el propio decreto sanitario yendo sin médico facultativo, un experimento con la salud de las personas.

Vimos en pandemia los hospitales voladores de La Fe, las mascarillas fake que llenaban los pasillos de Feria Valencia de devoluciones de los departamentos. Hemos visto como la Generalitat a la vez que aplaudía a los sanitarios los despedía por WhatsApp, para al final acusarlos de «sustracción de material«.
Ahora vemos como se ataca a los derechos laborales desde el supuesto progresismo, y se discrimina a trabajadores. Vemos como se revierte la gestión de departamentos de salud para sustituir a expertos en gestión sanitaria por concejales y cargos con carnet de partido sin ninguna experiencia sanitaria. Ahora vemos como se contrata a empresas catalanas para que hagan las resonancias revertidas a lo público en un camión a la puerta de los hospitales con una nueva privatización. Un sinsentido tras otro de alguien que va como popularmente se dice «como pollo sin cabeza».

Los valencianos no podemos más. Usted X. Puig perderá las elecciones por la inutilidad de dirigir absolutamente nada, por jugar con la vida de los valencianos y por seguir siendo negacionista de la realidad. Los valencianos no podemos más.