El caso AZUD rodea a Chimo Puig mientras él se instala en el «y tú más» para no dar explicaciones

El juez ha levantado el secreto de sumario de dos de las seis piezas del caso AZUD, que ocupa centenares de miles de folios ya y cuyas investigaciones siguen en curso todavía.

Los dos tomos levantados han dado para mucho. De hecho nos han permitido averiguar cómo parece que el PSPV acudió dopados a las elecciones. Estos últimos 4.000 folios de secreto judicial levantado están descubriendo los entresijos de la política y cómo la corrupción sigue instalada en nuestras instituciones.

El ex-tesorero del PSPV habría reconocido ante el juez cómo derivó fondos privados a campañas electorales del PSPV, pero como el fruto del dinero recogido irregularmente no fue directamente a su biolsillo, la nueva ley de malversación no le afectará en exceso, ya que fija la cantidad de 250.000€ como beneficio propio. En este caso eran presuntas comisiones que se utilizaban para pagar facturas electorales de terceros, no iban a las cuentas privadas de una persona.

Puig mira hacia otro lado

La respuesta del President de la Generalitat Valenciana ante las sospechas de que hasta su propia campaña pudo estar financiada con comisiones irregulares, su respuesta lejos de intentar dar luz arroja más sombras, dudas y sospechas. El «y tú más» propio del que no tiene otro argumento se puso sobre la mesa.

«Recuerdo que quien gobernaba era el PP»

Estas palabras de Chimo pUig, secretario general del PSPV adolecen de cualquier reflexión ni autocrítica. Tampoco hay reacciones de la actual presidenta del PSPV, Ana Barceló, candidata a la alcaldía de Valencia ex-consellera y actual síndica del PSPV en Corts Valencianes.

Parece que para Barceló ella pasaba por allí. Nadie en el PSPV da explicaciones por este escándalo de corrupción que afecta directamente al aparato del PSPV.

Fuentes de Compromís se hacen muchas preguntas

La mejor estrategia es un ataque y para olvidar que también algo les toca a Compromís, mejor atacar. Eso deben de pensar en la coalición independentista y catalanista. Así, aseguran que las investigaciones se deben de centrar en el popular Jorge Bellver y en el socialista Vicent Sarriá.

El problema es que Bellver es aforado y su investigación derivaría el caso al TSJCV. Por su parte, Vicent Sarriá es diputado en el Congreso y su investigación derivaría el caso al Tribuanl Supremo directamente.

Los valencianos queremos saber qué ha pasado para apartar a los corruptos de las instituciones, pero parece que Chimo Puig no tiene voluntad política de arrojar luz sobre este tema que le afecta ya a nivel personal. ¿El gobierno de la transparencia?. Pues es el que adjudica campañas institucionales a dedo según la ideología, o el que hace homenajes a falangistas como Fuster excusándose en que eran «grandes pensadores». También lo fue Hitler y nadie en su sano juicio le dedica un año en ninguna Comunidad Autónoma.