La reforma del delito de sedición del Gobierno ya tiene la primera consecuencia: en libertad los migrantes que cerraron el aeropuerto de Palma

En Noviembre de 2021 hasta un total de 22 migrantes simularon una emergencia médica para forzar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Palma de Mallorca. Una vez tocado tierra el avión, hasta 22 migrantes escaparon de la aeronave por las pistas.

Las consecuencias fueron el cierre del aeropuerto durante casi cuatro horas. lo que provocó más de 60 aviones desviados a otros aeropuertos y muchos vuelos cancelados. Desde esa fecha, están 22 migrantes detenidos.

En libertad gracias a la reforma de la sedición

La petición de la fiscalía era de cindo años por un delito de desórdenes públicos. Pero ahora con la reforma del delitod e sedición, esa pretensión de la Fiscalía no ancajaría con la nueva redacciónd el delito, por lo que se ha visto obligada a poner en libertad a los 22 migrantes detenidos.

En Diciembre de 2022 los hechos se asemejaron mucho a un incidente ocurrido en el Aeropuerto del Prat.

Ahora parece que el simular una emergencia aérea, el obligar a desplazar a miles de pasajeros no encaja en los delitos de desórdenes públicos bajo su nueva redacción y estos 22 migrantes han salido en libertad.

La Fiscalía mantenía un delito de sedición amparándose en una ley de Navegación Aérea de 1.964. Ahora con la nueva redacción del Código penal en relación al delito de sedición, las penas se aminoran hasta los tres años. Por lo que la Fiscalía de Palma ha tenido que dejarlos en libertad.

Retirada de pasaporte como única precaución

Por contra, la Fiscalía ha tomado la precaución de retirarles el pasaporte y aconseja su ingreso en un CIE (Centro de Internamiento de Extranjeros). Una «situación nunca antes vista en la historia aeronáutica española». «Una situación sin precedentes» que ahora afecta la rebaja de condenas votada por el gobierno de PSOE y Unidas POdemos y apoyada por sus socios independentistas.

¿Tenemos una nueva chapuza en la elaboración y redacciónd e la ley?. Esto se preguntan ahora los jueces, ante lo que puede ser un nuevo «problema» como el de la aplicaciónd e la ley del «sólo sí es sí».