Todo empezó con una búsqueda. La de unos padres —Laura, diseñadora de calzado; Héctor, ingeniero— que querían proteger los pies de su bebé sin limitar su desarrollo. Pero lo que encontraron fue un mercado lleno de zapatos rígidos, estrechos, antinaturales. Así que, como hacen los valientes, decidieron crear lo que no existía.
Diseñaron el primer par en casa. Sin pretensiones. Solo con amor, intuición y conocimiento. Y lo que empezó como una necesidad personal se convirtió, paso a paso, en un movimiento colectivo.
Hoy, Zapato Feroz es una marca referente en calzado barefoot para toda la familia. Diseñan con criterios podológicos, producen de forma cercana y responsable, y promueven una nueva forma de consumir: consciente, lenta, conectada con los ritmos reales de la vida.
Desde Valencia y con producción en Portugal, han demostrado que se puede crecer sin renunciar a los valores. Sin grandes campañas. Sin inversores. Solo con una comunidad feroz que cree, camina y comparte.
Más que calzado, una forma de mirar el mundo
Los zapatos Feroz están hechos para moverse con libertad:
- Puntera ancha para que los dedos respiren.
- Suelas finas que permiten sentir el suelo.
- Materiales naturales, duraderos y seguros.
- Diseños que acompañan cada etapa: del gateo al juego, del cole a la oficina
Su catálogo incluye modelos para bebés, peques, adultos y accesorios diseñados para durar. Y todo bajo un mismo principio: “antes no es mejor” muy ligado a la crianza respetuosa y al acompañamiento de Emmi Pikler.

Ferozland: el lugar donde el cuento cobra vida
En 2024, el sueño se hizo espacio. Ferozland abrió sus puertas en La Cañada (Valencia): un entorno natural de casi 000 m² donde conviven una tienda conceptual, una sala de movimiento libre, oficinas sostenibles, un jardín, un bosque y muchas risas pequeñas.
Allí desaparecen los límites entre dentro y fuera, entre vender y cuidar, entre empresa y comunidad.
Más de 6.000 familias ya han vivido la experiencia Feroz: talleres, formaciones, juegos, charlas, vínculos. Y, sobre todo, una manera distinta de estar en el mundo.
Ferozland no es una tienda. Es un lugar donde todo lo que Zapato Feroz cree —en la infancia, en la sostenibilidad, en el respeto, en la belleza de lo simple— se puede tocar, sentir y compartir.

Un modelo que no grita sostenibilidad: la practica
Desde sus inicios, Zapato Feroz ha apostado por la coherencia.
- Producción bajo demanda, sin sobrestock ni prisas.
- Packaging sin residuos innecesarios.
- Economía de proximidad.
- Iniciativas solidarias y comunitarias.
- Diseño sin temporalidad.
Porque lo verdaderamente feroz no es gritar más fuerte. Es caminar con paso firme hacia un futuro más justo, amable y saludable.

 
			

















