Les Arts invita a la Compañía Nacional de Danza, María Pagés Compañía y La Veronal para su ciclo de danza

Les Arts invita a la Compañía Nacional de Danza, María Pagés Compañía y La Veronal para su ciclo de danza

  • Las diferentes propuestas incluyen desde el ballet clásico a las nuevas creaciones contemporáneas pasando por el flamenco
  • El Teatre Martín i Soler y la sala principal acogerán los diferentes espectáculos del segundo ciclo de danza de Les Arts

El Palau de les Arts invita a la Compañía Nacional de Danza, María Pagés Compañía y a La Veronal para la segunda edición de su ciclo ‘Les Arts és Dansa’.

La sala principal y el Teatre Martín i Soler acogen las diferentes propuestas, que incluyen desde el ballet clásico hasta las nuevas creaciones contemporáneas, pasando por el flamenco, con tres espectáculos a cargo de compañías españolas especializadas en cada uno de los estilos que presentan.

‘Les Arts és Dansa’

Les Arts comienza este ciclo con el debut de María Pagés Compañía, uno de los máximos exponentes del flamenco español, los días 6, 7 y 8 de noviembre. La sala principal recibe a la bailaora y coreógrafa sevillana, Premio Nacional de Danza y Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, con ‘Una oda al tiempo’, espectáculo que Les Arts recupera tras su cancelación la pasada temporada.

María Pagés, directora, coreógrafa y creadora del vestuario del espectáculo, reflexiona sobre la contemporaneidad y sobre el necesario diálogo con la memoria, dentro del ciclo de propuestas con las que Les Arts inaugura la temporada 2020-2021 y que sugiere un ejercicio de introspección sobre la capacidad de superación del ser humano.

Pagés plantea desde el flamenco, contando con la dramaturgia y los textos de El Arbi El Harti, una reflexión ética y artística sobre el presente; se pregunta sobre el mundo actual; revisa la luz y las sombras de nuestro tiempo; habla de lo efímero, la eternidad y de la implacable irreversibilidad del tiempo sobre el cuerpo, el deseo, el arte y la vida.

Acompañada por cuatro bailaoras, cuatro bailaores y siete músicos, la genial sevillana explora la tradición cultural española; revisa los palos flamencos nutriéndolos de la música de Ígor Stravinsky, Bernard Herrmann, John Cage, Antonio Vivaldi y Georg Friedrich Händel.

En el mes de marzo, Les Arts encomienda su incursión en la danza contemporánea a La Veronal, una de las compañías más internacionales del país, que dirige el valenciano Marcos Morau, Premio Nacional de Danza 2013. El 12, 13 y 14 de marzo, el Teatre Martín i Soler presenta ‘Sonoma’, estrenado recientemente en el Festival Grec.

El director de La Veronal retoma las principales líneas del montaje que creó en 2016 para el Ballet de Lorraine, ‘Le Surréalisme au service de la Révolution’, inspirado en el universo de Luis Buñuel y la Calanda medieval junto con el París cosmopolita. En ‘Sonoma’, Morau amplía y desarrolla todo este microcosmos, en el que Buñuel describe el abismo donde cae la imaginación humana, que es libre, pero el hombre no lo es.

Como el mismo coreógrafo ha explicado, «‘Sonoma’ no existe en el diccionario, pero contiene partes del griego ‘soma’ (cuerpo) o del latín ‘sonum’ (sonido). Hoy vivimos la historia a toda prisa, tan rápido que apenas podemos seguirla. Podría decirse que caemos hacia delante y que, durante esta caída acelerada, como en una montaña rusa, gritamos. Sonoma sería ese sonido del cuerpo al caer».

La Compañía Nacional de Danza clausura, a finales de junio, ‘Les Arts és Dansa’ con una nueva producción de uno de los grandes clásicos del género, ‘Giselle’, quinta esencia del ballet romántico, con música de Adolphe Adam, coreografía de Jules Perrot y Jean Coralli y libreto de Théophile Gautier y Jules-Henri Vernoy, basado en la obra ‘De l’Allemagne’ de Heinrich Heine.

Joaquín De Luz, quien fue durante años bailarín principal del New York City Ballet y desde septiembre de 2019 dirige la Compañía Nacional de Danza, propone una ‘Giselle’ vista a través del romanticismo español. Su planteamiento, inspirado en la poesía de Bécquer, sin abandonar los elementos que han hecho de la obra un clásico, incluye también motivos propios de la escuela bolera y de las tradiciones españolas.