– Recogen información de procesos criminales con declaraciones de testigos, sentencias y embargos por deudas y ventas
El Institut Valencià de Conservació, Restauració i Investigació (IVCR+i) ha restaurado tres libros de la Cort del Justícia de Cocentaina del siglo XIV que recogen información relativa a procesos, sentencias y competencias judiciales relacionadas con la figura del justicia de esta localidad.
Estos libros permiten conocer cómo se administraba la justicia en Cocentaina en el siglo XIV, sus órganos de administración y los brazos ejecutores con que contaba el Gobierno municipal.
El justicia actuaba como juez ordinario, civil y criminal y debía llevar unos registros sobre su actividad, la cual era muy diversa, desde procesos criminales con declaraciones de testigos y sentencias, hasta embargos por deudas y ventas. Por tanto, esta documentación permite acercarse al conocimiento de la vida cotidiana medieval de los contestanos.
Los libros restaurados (‘Cort del Justícia 1303-1304’, ‘Cort del Justícia 1305’ y ‘Cort del Justícia 1303-1306’) serán presentados esta tarde en el Archivo Municipal de Cocentaina por la directora del IVCR+i, Gemma Contreras, y por la alcaldesa de Cocentaina, Mireya Estepa Olcina.
El Archivo Municipal de Cocentaina es uno de los más importantes de la Comunitat Valenciana, tanto por la cantidad de documentos que alberga como por la antigüedad de estos. En él podemos encontrar documentación fruto de la actividad municipal desde el año 1269 hasta la actualidad.
Proceso de restauración
La intervención se ha realizado sobre los tres libros con cubierta de pergamino flexible, posiblemente reutilizado, que carecen de solapas y cierres. Destaca el papel, que es del tipo denominado papel andalusí, de fabricación artesanal a partir de triturar trapos de lino de un modo muy rudimentario hasta formar una pasta y encolarla con almidón, por lo que es usual encontrar restos de hebras de color azul de los tejidos triturados en su fabricación. Las hojas de papel carecen de filigrana.
Cuando el estado de conservación es bueno, el acabado del papel andalusí es de apariencia satinada e incluso brillante, pero, en este caso, era mate y algodonoso debido a la pérdida de resistencia por la acción de microorganismos. Las encuadernaciones de pergamino presentaban suciedad, exfoliación, faltantes, sequedad y dobleces. El lomo estaba deformado y el cosido había perdido su función.
La restauración ha consistido en la limpieza de las cubiertas de pergamino con antifúngicos, y la reintegración de faltantes con papel japonés y cromáticamente con acuarelas. El cuerpo del libro se limpió en seco y, después, en húmedo con solución hidroalcohólica en mesa de succión, consolidando las zonas algodonosas con pulverización de almidón de trigo muy diluido.
Tras el proceso de secado de las zonas preconsolidadas se reforzaron estas con papel japonés de bajo gramaje rehumectable preparado con almidón de trigo, lo cual permite la legibilidad de la escritura del documento. Los injertos se han realizado con pulpa de papel de color similar. Los cuadernillos se volvieron a coser con el mismo sistema de cosido que tenían originalmente. Finalmente, se han realizado unas cajas de conservación para protegerlos de los agentes que los habían deteriorado.