Según fuentes municipales, la organización de la «Cabalgata de Reyes estática» en la Plaza de Toros de Valencia costó 160.000€.
Compañías de teatro, escenario, alquiler de equipos, vestuario,…todo vía contratos menores y sumando según ha denunciado el concejal santi Ballester 160.000€.
Por cierto en las gradas la mayoría de los asistentes a este acto infantil eran adultos. Un sisnsentido más hacer un acto infantil y llenarlo de adultos.
¿5.000 espectadores?
Según asegura el Ayuntamiento de Valencia fueron 5.000 los asistentes al espectáculo, pero como se observa en las fotografías que el propio Ayuntamiento ha distribuído als gradas estaban prácticamente vacías. La realidad es queel aforo de la plaza de toros es de 10.500 espectadores. De ellos los dos pisos de palcos suman cerca de 2.000 asientos. Con lo que de estar llena serían 8.500 espectadores. Las fotografías dan cuenta de estar entre un 30% y un 35% de la capacidad. Así, el aforo real no superaría las 2.500 personas que disfrutaron del espectáculo. Aún así, desde Concejalía de Cultura Festiva se asegura se sacaron 5.000 entradas.
A esta cifra hay que añadir los «invitados» de cada concejal, los de Alcaldía o los de la propia Concejalía. ¿O bien esos estaban entre los 5.000 asientos previstos? Lo que indicaría que al público se sacaron realmente la mitad del aforo previsto de 5.000 personas.
Las entradas, ¿cómo se consiguieron?
Las entradas se pusieron a disposiciónd el público el martes 4 de enero, sin ninguna publicidad previa en una web habilitada para ello. Fuentes municipales aseguran pusieron a disposición 5.000 entradas, auqnue luego el aforo ocupado en la plaza claramente se vió inferior.
Las entradas en esta web que nadie conocía «se agotaron en menos de una hora». Un extraño que para pedir cualquier ayuda municipal haya menos solicitantes y la web se caiga constantemente. En esta ocasión han podido descargar y reservar sus entradas 5.000 personas en menos de una hora.
160.000€ a dedo
Lo que es de nuevo un escándalo es que el Ayuntamiento vuelava a abusar de los contratos a dedo. Esta navidad entre distintas contrataciones se han hecho este tipo de contratos menores por importe o de emergencia, todos a dedo, por un valor superior a los 300.000€.
Así, la Concejalía a pesar de las llamadas al órden desde Intervención Municipal vuelve a la vieja práctica de contrataciones a dedo sin ninguna publicidad y nula transparencia.
El año pasado, la pseudocabalgata polémica que incumplió todas las normas sanitarias ya se efectuó toda la contratación de la misma manera. Una práctica habitual de la Concejalía de Cultura Festiva especialmente que se extiende por muchas concejalías del Ayuntameinto de Ribó y que humilla directamente a toda ley de transparencia y buen gobierno.
Los códigos del buen gobierno deberán ser para otros, porque Ribó y Compromís hace mucho que los olvidaron, si es que alguna vez los tuvieron en cuenta.
