El Ajuntament de Valencia acepta la cesión gratuíta de ADIF de la estación del Grao tras ofrecerse hace más de un año por la operadora

  • El Ajuntament llegó a asegurar que quería comprar el edificio que ADIF cedía gratuítamente al Consistorio Municipal.

En el planeamiento urbano del suelo de Valencia, y en algunas modificaciones del PGOU en el sector del Grao, el Ajuntament de Valencia grafió este edificio, la más antigua estación de tren de España, como de uso dotacional. Una infraestructura que la misma ADIF reconoció que llevaba años negociando con el Ayuntamiento de Valencia su cesión gratuíta a la Ciudad para que se cumpliera su función de uso dotacional calificada en el PGOU.

Una nueva denuncia del Círculo del Patrimonio por el abandono del BRL

Esta estación está calificada como Bien de Relevancia local, y está abandonada, por lo que en el 2013, varios colectivos empezaron a solicitar al Ayuntamiento que como BRL acabara con la situación de abandono de la antigua estación.

Ahora sabemos que el Ayuntamiento en respuesta a la oposición y al propio Síndic d’Agravis volvió a faltar a la verdad y ocultar esas negociacioens de cesión gratuíta con ADIF

De nuevo hemos conocido que el Ayuntamiento ha ocultado información, en este nuevo ejemplo de total opacidad, ya que la propia ADIF reconoce que desde hace años está el ofeecimiento gratuíto al Ajuntament de Valencia.

Un edificio que debía ser cedido por ADIF y que Patrimonio Histórico ( Gloria Tello) aseguraba a su vez que había de ser comprado, cuando ADIF lo ofrecía de manera gratuíta.

Pues resulta que fruto de ese planeamiento, desde el Ajuntament de valencia «se olvidó» notificar a la Mercatil ADIF el mismo y por tanto pedir la cesión gratuíta del edificio.

Un Consistorio que parece la antigua banda del Empastre…cada uno a su rollo

Así, casi 12 años después de la modificción del PGOU y tras varios años ADIF intentando ceder el edificio de manera gratuíta al Ajuntament de Valencia, por fin, este BRL se ha cedido al Ayuntamiento.

Todo esto demuestra la total descoordinación entre concejalías, sobre todo las de distinto color político, en este caso Urbanismo ( de la vicealcaldesa socialista Sandra Gómez) y Patrimonio Histórico, de la edil de Compromís Gloria Tello. Igualmente todo se ha demorado por los «olvidos» de notificaciones a ADIF por parte del Consistorio Municipal.

Un nuevo ejemplo de total incapacidad para el cargo de algunos de los servicios municipales, más preocupados en sus fiestas y vender proyectos a futuro que en realizar su trabajo. Un Ayuntamiento que no funciona, que pudo aceptar hace más de un año la cesión del edificio. Donde algunos de sus servicios, dada su incomunicación con otros, pretendían comprarla, a pesar de ADIF ofrecerla gratis. Un sinsentido más de este Ayuntamiento a la deriva en el que se ha convertido el Ajuntament del Cap i Casal.

El Ayuntamiento de las fiestas y el marketing

Este Ayuntamiento se ha convertido en los últimos meses el del marketing y la venta de proyectos a futuro. Todo ello mientras la ejecución de proyectos cada año baja hasta situarse en menos de un 35% de lo presupuestado. Ahora se están ejecutando proyectos de 2017 o 2018, con cuatro años de retraso.

El Ajuntament sigue vendiendo proyectpos de futuro, maquetas y ficciones a futuro, pero la realidad es que ni ejecuta lo prometido ni acaba lo presupuestado. Años de retraso y atasco de licencias y de actividad. Un Gobierno que tira del cartón pluma y vende una ciudad del futuro alejada de la realidad que viven los ciudadanos.

Las fiestas no faltan, pero la gestión parece que puede esperar. Tampoco las subvencioens a amiguetes y afines que quan estómagos agradecidos loan a sus líderes que les llenan los bolsillos de billetes, mientras la sanidad, los servicios sociales o la educación se desmoronan y esperan atención.