La Lonja ha sido el escenario, este 5 de diciembre de 2023, de la conmemoración del veinticinco aniversario de la Declaración de Responsabilidades y Deberes Humanos, que tuvo lugar en Valencia.
Con este motivo, invitado por la Asociación Valencia/Mediterráneo para la Unesco, visitó nuestra ciudad el diplomático y científico Federico Mayor Zaragoza, en aquel momento director general de la Unesco, quien propulsó y refrendó dicha declaración. Junto a él se hallaban en la mesa Alberto Guerrero, director de la Federación Española de Asociaciones y Clubes para la Unesco (FECU), Rosa María Rodríguez Magda, exidirectora de la Fundación Valencia Tercer Milenio-Unesco, y las autoridades Asunción Quinzá, secretaria autonómica de Igualdad, y M.ª José Ferrer San Segundo, primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de Valencia. El acto fue conducido por Rafael Monzó, presidente de Valencia/Mediterráneo para la UNESCO.
El salón columnario de la Lonja se llenó con representantes de instituciones y asociaciones culturales, del cuerpo consular, de la universidad, del Consell Valencià de Cultura, del Tribunal de la Aguas, así como de políticos, escritores y público en general.
Valencia epicentro de la reflexión
La “Declaración de Responsabilidades y Deberes Humanos” (DRDH) fue redactada en Valencia, en 1998, por un comité de expertos internacional, bajo la supervisión del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Impulsada por el Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat, y llevada a cabo por la Fundación Valencia Tercer Milenio-Unesco, su directora cultural, la filósofa Rosa M.ª Rodríguez Magda, rememoró los hitos del programa “Valencia Tercer Milenio Unesco”, una cumbre internacional de primera magnitud cuya finalidad fue celebrar la llegada del año 2000. Valencia se convirtió en sede de importantísimos congresos y exposiciones artísticas que contaron con la participación de las más prestigiosas personalidades del mundo cultural internacional: los premios Nobel Dario Fo y Wole Soyinka, Umberto Eco, Hans Küng, Marisa Berenson, María Lourdes Pintasilgo, primera ministra de Portugal, y una larga serie de intelectuales, mandatarios, representantes de organismos internacionales…
De todos los proyectos que cristalizaron en aquellos momentos, el más relevante fue, sin duda, la redacción de la DRDH, en el año cuya presentación internacional se llevó a cabo en la Lonja de Valencia el 5 de diciembre de 1998.
Esta Declaración de Responsabilidades y Deberes fue impulsada por Federico Mayor Zaragoza, entonces director general de la UNESCO, al cumplirse los 50 años de la Declaración de DDHH, porque se estimaba que la Declaración de Derechos necesitaba ser complementada por una Declaración de Responsabilidades y Deberes que expresara con toda claridad a quién corresponde el deber moral y la responsabilidad legal de cumplirlos y de hacerlos cumplir.
La Declaración fue presentada por el Gobierno español en la Asamblea General de la Unesco en 1999, y entregada a Kofi Annan, secretario general de Naciones Unidas.
Federico Mayor Zaragoza: “Valencia debe seguir siendo la ciudad de la esperanza liderando más que nunca las responsabilidades y deberes del ser humano”
“Después de 25 años de aquel encuentro tan relevante y tan escuchado internacionalmente, los conflictos continúan aún, las preocupaciones están ahí, y la pregunta después de aquello es si estamos aquí para revisar y decir: ¿ahora qué? Pues claro que sí, porque hay unos nuevos protagonistas y nuevas posibilidades.
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Ha sido continuo oír ‘si vis pacem, para bellum’ y eso ha prevalecido durante siglos y siempre con hombres y hasta hace nada bajo el lema:
‘La razón de la fuerza era la que prevalecía sobre la fuerza de la razón’. Pero por suerte también ha habido y hay gritos de cambios de conducta con una gran disyuntiva: ‘si vis pacem para verbum’; es, pues, con la palabra, con la negociación, con la creatividad, con la capacidad de crear de cada ser humano único nuestra esperanza, porque podemos inventar un futuro mejor no estando sometidos a nada que no pueda mejorarse y prevalecer en nuestros comportamientos. Estamos a tiempo”, ha aseverado Federico Mayor Zaragoza.
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Pero el alto diplomático ha continuado afirmando que “debemos mantener la Cultura de la Paz, de la palabra, de nuestras responsabilidades y deberes como seres humanos.
He venido a Valencia a decir nosotros los pueblos iguales en dignidad, en creencias, en condición, este es el camino de ser iguales, ya podemos participar, es crucial, ya podemos y ya debemos participar y que aquella declaración continúe vigente, se actualice y Valencia siga siendo referente del pensamiento. Por eso la sociedad civil valenciana, la Generalitat y el Ayuntamiento debéis seguir ese camino ya sembrado en 1998”.
En este sentido tanto la Secretaria autonómica de igualdad, Asunción Quinzá, y la teniente de alcalde, M.ª José Ferrer San Segundo, han asumido el reto lanzado por Federico Mayor Zaragoza para poner en marcha un grupo de trabajo que actualice la “Declaración de Valencia”.
