Vero Petreanu: “Dejar atrás lo que ya no sirve”
A veces nos quedamos pegados a situaciones, personas, circunstancias o limitaciones creyendo que no podemos cambiar, cuando en realidad siempre tenemos la opción de hacerlo. Solo hemos de decidirlo con todo nuestro ser.
Dejar ir a personas que ya no tienen ningún propósito en nuestras vidas ni en nuestro crecimiento es, desde luego, unas de las cosas más difíciles, y sin embargo es una necesidad en nuestro proceso de crecimiento y expansión. Ahora bien, implica practicar plenamente la autoindagación, el autocuidado, el desapego, y saber que las decisiones vienen desde un lugar profundo, intuitivo, donde no es que no hagamos nada porque nos consideremos superiores, sino porque el fluir de la vida nos lleva por otros derroteros y simplemente estamos escuchando a nuestra guía interior. Significa también que agradecemos plenamente la presencia en nuestra vida de ciertas personas durante un corto o largo periodo de tiempo, con todo su aprendizaje, pero ahora nuestro camino, sencillamente, ya no es el mismo, y seguir significaría forzar, lo contrario a fluir.
Dejar ir patrones de conducta, pensamientos limitantes que en algún momento nos sirvieron, incluso sin saberlo, a veces reside en ese acto de profundo deseo, de sentirnos merecedores, del coraje de hacer cosas o de pensar diferente incluso cuando las circunstancias exteriores nos tratan de convencer de que es en vano. Y ahí, en ese punto, empiezan los pequeños cambios.
El mundo que nos rodea es sólo una pantalla de lo que deseemos poner en ella.
Dejar de hacernos pequeños para despertarnos a nuestra grandeza es un continuo acto de coraje, autocuidado, respeto y amor propio.
Somos mucho más de lo que nos han contado que somos o de lo que hemos pensado que somos toda nuestra vida. Solo hace falta que deseemos descubrirlo con todo nuestro corazón y nuestro ser, y ahí está el punto de partida, que nos llevará poco a poco, a veces muy lento, a veces más rápido, a la magia del descubrimiento de nuestra verdadera autenticidad, que no solo iluminará nuestra vida, sino, de una u otra forma, las de otros.
Vero Petreanu
@merakiyogatherapy