Pedro va regalando nuestro dinero como si fuera suyo. Y lo peor, es que, si te fijas a dónde van destinadas las partidas de dinero, te aparecen cosas de lo más rocambolescas. Cualquier día nos encontramos con una partida de varios millones para la asociación de calceta en Zambia, o el club de esquí de Colombia.
Pero de lo que nadie puede dudar es de que el primer beneficiado es Marruecos.
Ayudas públicas españolas que van a parar a 250 «organismos» y «entidades de todo tipo», con un total de 30 millones (publicado en El País), eso el año pasado, además de coches nuevos para su policía, el Sahara y el control de las fronteras en Ceuta y Melilla. El próximo regalo serán las Canarias, pero seguro que habrá un referéndum de anexión.
Pedro es muy demócrata y reparte democráticamente nuestro dinero entre sus amigos de más allá de Gibraltar.
Hace unos días vimos un bochornoso vídeo de Marlaska babeando, agradeciendo la ayuda de Marruecos tras los estragos de la riada, obviando la ayuda de Francia o Portugal y, por descontado, obviando la ayuda llegada de toda España. Si se lee la página oficial de la Moncloa, de lo publicado por interior el día 12 de noviembre, detalla lo que manda Marruecos y generaliza y difumina lo demás.
No sé muy bien el porqué de esta afinidad entre nuestro gobierno y el marroquí. Se me escapa porque son tan amigos y porqué les regala nuestro dinero.
Marruecos no es un país en guerra, (por lo que aquellos que vienen no son refugiados) de hecho, se vive razonablemente bien si uno trabaja. Ahora bien, si no quieres trabajar, lo mejor es venir a Europa, que ya te darán todo tipo de ayudas para que vivas aceptablemente bien.
Solo el 22% de los marroquís residentes en España cotiza a la seguridad social. ¿De qué vive el resto? Pues nada más desembarcar, tanto marroquís como cualquier africano o asiático cuentan con esto desde 2013: Fondo Europeo para los Refugiados (FER) y Fondo Social Europeo (FSE), entre otros.
Copio aquí parte de lo que ofrece:
- Atención a necesidades básicas, enseres y gastos de suministro de la vivienda: Individual: 347,60 €/mes.
- Unidad de convivencia compuesta por 2 personas: 520,73 €/mes.
- Por cada persona sumada a la unidad de convivencia (unidad inferior a 5 personas): 37 €/mes.
- Unidad de convivencia compuesta por 5 o más personas 792,73 €/mes
- Alquiler de vivienda: Individual: hasta 537 €/mes.
- Unidad de convivencia compuesta por dos o más personas hasta 766,30 €/mes.
- Impago de alquiler de vivienda: máximo dos mensualidades de alquiler.
- Fianza: máximo dos mensualidades de alquiler.
- Gastos de gestión de una agencia de alquiler: máximo una mensualidad de alquiler y el 21% de IVA.
- Adquisición de vestuario: máximo dos ayudas al año 181,70 €/persona/cada 6 meses de participación en el programa.
- Ayudas de bolsillo para personas que residan en un dispositivo de acogida. Gastos de bolsillo (siempre que no se reciban dentro del servicio de acogida temporal). Cuantías máximas: Individual: 51,60 €/mes. Menores de 18 años: 19,06 €/mes.
Y se habrá actualizado, ahora sabemos que los centros no dan abasto y que los alojan en hoteles.
Multipliquemos esto por la cantidad de extranjeros que entran solo en España y contando los 11 años que han pasado. Y esto no es lo único, la Universidad Internacional de Valencia anunció en julio de 2024 el lanzamiento de 20 ayudas al estudio dirigidas a personas con nacionalidad marroquí que cuenten con residencia en España. Las ayudas cubren el 100%, el 75% o el 50% de la docencia para uno de los 20 másteres incluidos en el programa.
Pero si sus hijos, sufrido contribuyente, quieren hacer un máster, ¡págueselo usted!
Lo normal es dar ayudas cuando puedes, y no solo hablo de España, toda Europa va cuesta abajo. En España estamos muy lejos de poder darlas. Tenemos graves problemas de todo tipo. La vivienda está por las nubes, somos líderes en paro juvenil, los precios disparados, casi el 30% de las nóminas se lo lleva el estado y tenemos una deuda inasumible. Y en vez de trabajar para solucionar estos problemas, se dedican a viajar regalando el dinero como si creciera en los árboles.
Y aquí, estamos peleándonos porque a una señora la llaman gorda, porque se celebran 50 actos para conmemorar la muerte de un señor en la cama. Que si La Revuelta o El Hormiguero, que si Feliz Navidad o Felices Fiestas, que si Bertrand NDongo o Ana Pardo de Vera… Mientras, nos trocean y nos regalan, nos expolian y nos amordazan. Nos abandonan en las catástrofes y se ríen de nosotros, «si necesitan más ayuda que la pidan».
Marruecos o Palestina, no tienen que pedir nada, se les da lo que pidan sin rechistar. Pero ¿esto qué es?
Pues creo que «lo que es» es, que el sistema está tan podrido, que aquellos que llegan a las instituciones o puestos de responsabilidad, no están ni por hacer su trabajo, ni por nada que no sea perpetuarse y amasar fortunas de cualquier modo a su alcance. Que parece que estén a sueldo de intereses foráneos y que todo lo hacen a base de exprimirnos como a un limón. Que la misma Unión Europea se está convirtiendo en nuestro peor oponente y que el gobierno central y los autonómicos son, en el mejor de los casos, incompetentes y, en el peor, el enemigo.
Que si se pierde algo de tiempo en ver dónde va el dinero de nuestros impuestos, se comprueba rápido qué poco va a Sanidad, Educación y a Infraestructuras. Que lo que se destina a eso es de risa, que, si se suma el despilfarro en ayudas a extranjeros tanto inmigrantes como a otros países, se podrían solucionar bastantes problemas.