La Generalitat califica de “hito cultural histórico” el acuerdo de adquisición de la colección de obras de arte de la familia Lladró

– La colección adquirida consta de 73 obras entre las que destacan lienzos de Sorolla, Juan de Juanes, Ribera, Zurbarán o Pinazo

– El president de la Generalitat anuncia que a finales de enero las obras serán expuestas durante seis meses en el Palacio de les Comunicaciones de Valencia y podrán ser visitadas de manera gratuita

– El legado pasará a formar parte de los fondos del Museo de Bellas Artes de Valencia, considerada la segunda pinacoteca más importante de España

El presidente de la Generalitat, Chimo Puig, ha calificado de “hito cultural histórico” el acuerdo de adquisición de la colección de obras de arte de la familia Lladró constituida por 73 obras pictóricas que pasan a formar parte de los fondos del Museo de Bellas Artes de València.

Puig ha realizado estas declaraciones en el acto de presentación del acuerdo alcanzado con la familia Lladró para adquirir la colección artística, en el que han participado Luz Lladró, hija de Juan Lladró, y la consellera de Educación, Cultura y Deporte, Raquel Tamarit.

En el transcurso del acto, el president ha agradecido a la familia Lladró su contribución a “preservar el patrimonio valenciano” y especialmente “su decisión de priorizar que este patrimonio se quedara en València para ser propiedad del pueblo valenciano”.

En este sentido, el jefe del Consell ha indicado el patrimonio artístico de los valencianos “crece hoy de una manera notable” con estas 73 obras “excepcionales” del arte clásico español que la familia reunió “con mucho esfuerzo” y con el asesoramiento del que fuera director del Museo del Prado, Alfonso Pérez Sánchez.

Asimismo, ha explicado que la colección pasará a formar parte del fondo del Museo de Bellas Artes de València, considerada como la segunda pinacoteca de España, lo cual permitirá “fortalecer, modernizar y visibilizar” este museo.

Ximo Puig ha destacado que la colección aporta al San Pío V “su primer Zurbarán, lo que enriquece nuestra colección de Barroco, y siete obras de Joaquín Sorolla, como la icónica Yo soy el pan de la vida que pasan a ser ahora patrimonio de las valencianas y valencianos”.

Exposición de la colección

Durante su intervención, el president ha adelantado que a finales de enero la colección será expuesta durante un periodo de seis meses en el Palacio de les Comunicaciones de València, para que pueda ser visitada de manera gratuita por la ciudadanía. La muestra será comisariada por el director del Museo de Bellas Artes, Pablo González Tornel.

Por su parte, Luz Lladró, hija de Juan Lladró, ha agradecido el interés de la Generalitat por la colección, lo cual ha permitido hacer realidad la voluntad de la familia de “convertir la colección en patrimonio de todos los valencianos”.

Lladró ha recordado que la colección nació de la voluntad de los tres hermanos de compartir su éxito empresarial con todos los valencianos y de su compromiso con la sociedad y cultura valenciana, por lo que recuperaron obras principalmente de artistas valencianos que se encontraban por todo el mundo. Por último, ha mostrado su satisfacción por que la colección pase a formar parte del Museo de Bellas Artes de València y enriquezca el patrimonio cultural valenciano.

Un total de 73 obras enmarcadas entre el siglo XV y el XX 

La colección Lladró, adquirida por la Generalitat por 3,7 millones de euros, fue iniciada en 1980 por Juan Lladró, empresario, artista español y decano de honor de la Real Academia de Cultura de Valencia, junto a sus hermanos, José y Vicente.

La colección, compuesta por 73 piezas, supone un extraordinario recorrido por el arte del siglo XV hasta el XX, con especial énfasis en los artistas valencianos. Así, más de un 80 % de las obras pertenecen a artistas nacidos en la Comunitat Valenciana. Destaca la presencia de pinturas de José de Ribera y su taller; las piezas de Zurbarán, Vicente Macip y de su hijo, Juan de Juanes, y el capítulo dedicado al regionalismo valenciano de los siglos XIX y XX con Vicente López, Joaquín Sorolla, Ignacio Pinazo, José Benlliure y José Segrelles.

La colección cuenta con siete pinturas de Sorolla, algunas con gran relevancia como la Labradora valenciana y el mural Yo soy el pan de la vida, obra singularísima dentro de la producción del artista y que convierte por sí sola la colección en una de las más destacadas que se han formado en España en las últimas décadas.