Valencia celebró este sábado una mañana luminosa en los Jardines de Viveros, donde la defensa de los derechos de la infancia dejó de ser una declaración simbólica para convertirse en un compromiso visible, vivo y compartido
Entre música, juegos, talleres y voces jóvenes, la Vicepresidencia Primera y Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda impulsó, junto al Ayuntamiento de Valencia, una feria de entidades dedicada íntegramente al bienestar, la escucha y la protección de niños, niñas y adolescentes.
En un ambiente festivo y reivindicativo, la directora general de Familia, Infancia, Adolescencia y Reto Demográfico, Angélica Such, subrayó un mensaje que resonó entre familias, profesionales y voluntarios
“La protección a la infancia es una obligación que el Consell asume con hechos y recursos; los derechos de la infancia no se celebran un solo día, se garantizan todo el año”
La jornada reunió a las principales organizaciones que sostienen la red de protección en la Comunitat Valenciana: entidades de acogimiento, asociaciones de diversidad familiar, voluntariado, inclusión, salud mental y atención a la vulnerabilidad. Todas ellas mostraron, a través de actividades educativas, dinámicas y talleres, el trabajo silencioso pero imprescindible que realizan con los más jóvenes.
Pero el acto alcanzó su punto más emotivo con la lectura del manifiesto, elaborado por los órganos de participación infantil y adolescente de la Comunitat. Una declaración que no solo reivindica derechos, sino que recuerda —con la claridad que solo tienen los niños— la responsabilidad colectiva de cuidarlos, escucharlos y acompañarlos.
Such destacó el refuerzo presupuestario para 2025: 86,5 millones de euros, un 17,8 % más que el año anterior
Un aumento que permitirá ampliar los Puntos de Encuentro Familiar, sostener programas esenciales de prevención, acogimiento, adopción y emancipación, y mejorar la atención a menores víctimas de violencia sexual. También remarcó la apuesta del Consell por el acogimiento familiar, con una inversión que ha pasado de 550.000 a 700.000 euros, además de nuevas deducciones fiscales para todas sus modalidades.
Junto a ella, entidades como Save the Children, ANAR, Cruz Roja, UNICEF, APNADAH, FANUCOVA, Cáritas, AVAF, FESORD, Kumpania, entre muchas otras, dieron forma a una mañana que recordó que la infancia no es solo el futuro, sino el presente que debe ser protegido.
En Viveros, quedó claro que la defensa de los derechos de la infancia no es un gesto, sino un camino. Un camino que se fortalece cada vez que la sociedad mira a los niños con la responsabilidad de quien sabe que todo empieza en ellos.















