Narciso Estellés pide actualizar el mapa del ruido de la ciudad de Valencia  

  •  Estellés valora «positivamente» que Grezzi rectifique las líneas de la EMT que causan molestias en el entorno de San Agustín e insiste en que «las decisiones de movilidad deben adoptarse teniendo en cuenta la contaminación acústica y del aire»  

Narciso Estellés, ha pedido actualizar el mapa del ruido en la ciudad de Valencia, tras conocer que el concejal de Movilidad y de Calidad Acústica y del Aire, Giuseppe Grezzi, ha decidido modificar las líneas que causan molestias a los vecinos del entorno de San Agustín y calle Xàtiva.

«Creemos que el mapa del ruido debería influir en la toma de decisiones referentes a movilidad y el urbanismo, ya que ciertas actuaciones en movilidad, como las de la calle Colón, han demostrado que en ningún momento han servido para pacificar el tráfico», ha declarado Estellés.

  • «Vemos muy positivo que Grezzi haya entrado en razón, pero todas las decisiones de movilidad deben adoptarse teniendo en cuenta su afección sobre la contaminación acústica y del aire», ha incidido.

El concejal naranja ha calificado de «llamativo» que se pacifique el tráfico en la Plaza del Ayuntamiento y «se instalen medidores de contaminación, donde ya se sabe que ha bajado el tráfico de vehículos». «Se deberían instalar controles medioambientales en otras zonas, como la calle Colón y le calle Xàtiva», ha sentenciado.

Sobre este asunto, Estellés ha explicado que «el último mapa del ruido publicado en 2017 ya contemplaba que en la zona de Xàtiva se estaban soportando niveles superiores a los > 75 dBA, y la OMS en su documento ‘Guías para el ruido urbano’, indicaba que valores sostenidos en áreas de tránsito superiores de 70 dBA pueden provocar deficiencia auditiva, «por eso mismo en el mismo documento pide que se consideren las consecuencias del ruido cuando se planifican sistemas de transporte y usos del terreno».

Por otra parte, el concejal de Cs ha explicado que el Real Decreto1367/2007, de 19 de octubre, por el que se desarrolla la Ley 37/2003, de 17 de noviembre, del Ruido, en lo referente a zonificación acústica, objetivos de calidad y emisiones acústicas, en su artículo 23, establece que el valor límite de ruido aplicable de nuevas infraestructuras viarias en zonas educativas y residenciales es de 80 dBA, «algo que sucede en la calle Xátiva con las viviendas y el IES Lluís Vives».

Para concluir, Estellés ha añadido que también el Real Decreto insta a que las administraciones adopten las medidas para evitar que, por efectos aditivos derivados directa o indirectamente de su funcionamiento, las nuevas infraestructuras provoquen que se superen los objetivos de calidad acústica para ruido marcados por el decreto con un límite de 55 dBA.