La imputada Mónica Oltra ha cedido a las presiones, insorpotables desde su sarao del sábado con Compromís y acaba de comunicar su dimisión como vice-presidenta del Consell.
Oltra acude a la sede de Compromís donde se había convocado una rueda de prensa para tratar su más que delicada situación, y allí ha confirmado su dimisión.
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Oltra también dimite de diputada en Corts Valencianes. Así, al no ser aforada no tendrá que declarara ante el TSJCV. El caso por tanto vuelve al Juzgado número 15 de Instrucción de Valencia y por tanto, Oltra no está imputada, ya que ahora deberá de decidir si imputarla el juez que elevó al TSJCV su petición.
Así, Oltra ahora mismo burla al TSJCV y la causa deberá ser ampliada en el Juzgado 15 y por tanto, la jugada maestra consigue retrasar todas las actuaciones judiciales.
Una dimisión «pactada»
La situación se había hecho insostenible tras los últimos días, y cabe saber qué pasará con el ejército de sus 21 asesores.
A lo largo de la mañana muchos cargos de Compromís ante la gran presión habían pactado y hablado de pactar una «salida razonable» a la extrema gravedad de la situación. Especialmente desde el «sarao» del sábado donde aseguraban que «Somos muy de Mónica».
A pesar de lo mostrado el sábado, resulta que ya estaban algunos dirigentes de Compromís pactando y negociando desde el pasado fin de semana. Traicionando a sus votantes y a su compañera con falsas fiestas y afirmaciones.
«Mientras decían Somos Muy de Mónica Compromís empezaba a pactar una salida razonable de Oltra».
Un compromís que sale muy tocado
De esta crisis que aún no ha acabado, la coalición independentista sale muy tocada. Por una parte la vergonzosa imagen del «sarao» del sábado que daba una imagen lamentable de la política valenciana a nivel nacional. Tampoco fuerona fortunadas las palabras de Baldoví asegurando que «Si tocan a una, nos tocan a todas» refiriéndose a Oltra. pero la comparacón es odiosa con la menor.
Ahora la imagen de Compromís está muy tocada, por una parte ante la gran mayoría de la sociedad que les ve engañosos. Por otra parte, los radicales que apoyaban a Oltra ven esto como una traición.
Chimo Puig el invitado de piedra
Otra de las peronas que sale tremendamente perjudicada de todo esto es Puig. Ha sido el convidado de piedra incapaz de hacer su trabajo. Con una imagend el Consell y de la propia Generalitat Valenciana muy deteriorada. Pero la crisis no se cerra aquí.
Ahora habrá de explicar a la opinión pública por qué han acosado a la menor abusada y por qué no la han atendido correctamente. Difícilmente Chimo Puig está ya capacitado para dar ninguna lección de moralidad y ética después de todo lo sucedido en esta última semana.
Ahora muchos, incluso dentro de su partiudo se plantean su liderazgo y quieren siga a Oltra en su camino de salida del Consell. La legislatura está acabada y Chimo Puig también.
