Los vecinos de la Roqueta pasan otro fin de semana de infierno con peleas, gritos e inconvenientes con la discoteca

Los vecinos del barrio de la Roqueta del Cap i Casal siguen cada fin de semana viviendo su «infierno particular» gracias a la inacción del gobierno municipal de Ribó y Sandra Gómez.

Una conocida discoteca de la calle San Vicente entre San Agustin y Plaza de españa les quita el sueño cada fin de semana y festivo. Denuncian que la discoteca ubicada literalmente en un patio de manzanas y en los bajos de los edificios les impide conciliar el sueño.

Llevan años denunciando la ocupación de la vía pública de los clientes  alas puertas, ocupando los carriles de circulación a altas horas de la madrugada. Han visto peleas, altercados y botellones con gritos de madrugada. Además de sufrir los «restos» de la fiesta. Vomiteras en las aceras, micciones en los portales, restos de cristales. todo ello en las calles adyacentes a la discoteca y sin un servicio de limpieza conveniente que ataje estas conductas incívicas.

La pancarta de la discordia

Los afectados por la discoteca de la Roqueta denuncian que clientes y personal ocupan el carril bus y las zonas reservadas para residentes
Los afectados por la discoteca de la Roqueta denuncian que clientes y personal ocupan el carril bus y las zonas reservadas para residentes

En el Ayuntamiento se ignoraba intencionadamente, según parece, la situación de los vecinos hasta que colocaron en la fachada del edificio justo encima una gran pancarta pidiendo soluciones. Fue entonces cuando el Ayuntamiento reaccionó. Pero como relatan los vecinos con presiones de concejales y de la propia policía local para que quitasen la pancarta. No intentaban solucionar los problemas de los vecinos, sino que parece que el Consistorio capitaneado por Ribó y Sandra Gómez trataba de extorsionar a los vecinos para que no visibilizaran su situación.

¿Qué ha cambiado?

Pues nada o muy poco. Los problemas continúan con la inacción municipal ( según relatan los propios vecinos). Este mismo fin de semana, pequeños incidentes, más peleas y más restos de la fiesta de algunos que perjudica a unos cuantos.

Parece que lejos de solucionar los problemas, la nueva ley de contaminación acústica es un retroceso para los vecinos. Así, ahora es posible gracias a la nueva ordenanza municipal las discotecas en bajos de viviendas que nos e permitían en la anterior normativa municipal. Así, hay movimientos como el de la Calle Eduardo Boscá donde una antigua discoteca quiere reabrir en función de esta nueva normativa. Los vecinos ya están en pie de guerra.

Esto debe ser el buen gobierno de «gobernar con mano izquierda», un gobierno contra los vecinos.

PenyaRoja, Honduras, Ciutat Jardí, los problemas crecen

Si primero acudieron a la vía judicial, ganada por dos veces contra el Ayuntamiento de Ribó y Sandra Gómez por la recalificación irregular. Luego han ganado en tribunales la AA.VV. Ciutat Jardí y en espera de sentencia Honduras. Ambas denunciaron al Consistorio Municipal por impedir la declaración de Zona Acústicamente Saturada. Ahora los Tribunales les dan la razón y obligan al Consistorio a iniciuar el expediente. Cosa que parece no ha efectuado todavía.

Los problemas de los vecinos sin solución se acrecentan. Todo ante la pasividad municipal de un gobierno que ignora a sus ciudadanos y que éstos han de acudir a los tribunales para salvaguardar sus derechos. Ni siquiera en campaña electoral Ribó y Sandra Gómez se han preocupado por estos miles de vecinos y sus problemas.

Ruzafa también se queja de la pasividad municipal ante tanto desmadre. Eso sí el terreno ganado a los coches se ha convertido en un mar de sillas, mesas y sobrillas, con el consiguiente beneficio municipal por las tasas de ocupación de vía pública. Hacer caja e ignorar a los vecinos parece es el nuevo concepto municipal de gobierno de Gómez y Ribó.